La portería de la Real Balompédica Linense tiene dueño desde el comienzo de la pasada temporada. Nacho Miras (Úbeda, 19/07/1997) sigue creciendo a pasos agigantados junto a su equipo. Lejos queda ya aquel chico que tuvo que irse a Estados Unidos para compaginar fútbol y estudios. El guardameta, que fue el ‘Zamora’ de la pasada campaña en Segunda División ‘B’, sigue siendo protagonista en la Primera RFEF.
P: Tras terminar tu etapa juvenil decides hacer las maletas y marcharte a Estados Unidos para compaginar fútbol y estudios, ¿cómo fue esa experiencia?
R: La experiencia fue muy buena. Acabé mi etapa juvenil y aunque había opciones no sabía por donde tirar y fue cuando me surgió esa posibilidad. Salió la idea y me gustó mucho. Podía seguir mis estudios y además seguir jugando al fútbol y yo al principio no sabía cuanto tiempo iba a quedarme. Se fue alargando porque las cosas iban bien. Estuve jugando en el filial del Chicago Fire, del Colombus Crew…, pero seguía mirando hacia aquí porque mi objetivo era volver. Es una experiencia que se la recomiendo a cualquier persona.
Pude devolver la confianza haciendo lo que me gusta y pude crecer como portero. El año fue muy bonito.
P: Llegas a la Balona y tras un año en el club consigues ser el Zamora y ayudar al ascenso, ¿cómo lo viviste?
R: Era mi segundo año y la sensación fue maravillosa. La primera temporada, siendo todavía sub-23, no tuve muchos minutos pero el club apostó por mi y yo tenía ganas de devolver la confianza. Fue un año peculiar, siempre estaba el COVID presente, no era la típica campaña de 38 partidos…, individualmente yo estoy muy satisfecho con el año que hice y en lo colectivo llegó el ascenso. Pude devolver la confianza haciendo lo que me gusta y pude crecer como portero. El año fue muy bonito.
P: La temporada pasada el equipo se quedó a las puertas de la fase de ascenso tras caer ante el Algeciras y fue a la fase intermedia. ¿Hubo momentos de dudas tras ese varapalo?
R: El siguiente partido después del derbi fue el punto de inflexión. Fuimos a Marbella, ganamos en el último minuto pese a que sabíamos que no podíamos ascender y lo celebramos por todo lo alto. Cogimos un poco de ritmo y nos dio confianza. Después en la segunda ronda había rivales muy difíciles como Sevilla Atlético, Córdoba o Murcia. Las cosas salieron rodadas, ganamos los tres primeros partidos y fuimos a Murcia pudiendo ascender. Fuimos a ese partido sabiendo que no se podía escapar y así fue.
P: La nueva categoría ha supuesto un cambio brutal, ¿cómo la estáis viviendo desde dentro?
R: Cualquier persona que la viva desde dentro o incluso que la siga sabe que esta categoría no es la Segunda División ‘B’ de toda la vida. El hecho de que haya dos grupos, los desplazamientos, el jugar ante rivales que antes era inimaginable pensarlo. Y lo más sencillo, cuando pasas de 80 equipos a 40 se crea un filtro y hay un nivel mucho más alto. Se nota la diferencia. La categoría ha dado un salto y es bonito vivirlo desde dentro.
P: El equipo comenzó bien la temporada pero llega de nuevo el derbi ante el Algeciras y todo sale cruz, ¿qué pasó?
R: Al final es lo que tiene el fútbol. El Algeciras venía de perder 4-0 ante el Cornellá, nosotros veníamos de una buena dinámica, pero en esos partidos da igual como vengas. Cualquiera te puede pintar la cara en esta categoría. Nos llegan cuatro veces, nos hacen cuatro goles y cuando quieres reaccionar no puedes hacer nada. Te tiene que servir para que sirva de punto de inflexión. Volvemos a estar en una buena racha y nos debemos quedar con eso.
El techo de este equipo es no ponerse techo. Tenemos que ir partido a partido.
P: Pasado el trance del choque ante el Algeciras, perdéis ante el Barcelona B, pero la Balona vuelve a levantarse y está empatado con el Nástic, equipo que marca el playoff de ascenso. ¿Cuál es el techo de este equipo?
R: El techo de este equipo es no ponerse techo. Tenemos que ir partido a partido. Lo hablamos dentro del vestuario, esto va a ser una montaña rusa. Van a venir rachas buenas, rachas mala y tenemos que saber que cualquier equipo te puede ganar. Debemos estar preparados. Hay que mejorar, apretar y si nos relajamos vamos a ir hacia abajo. Este equipo siempre compite, confiamos en nosotros, en el míster y ese es el camino.
P: Uno de los hándicaps en la categoría son los desplazamientos tan largos, ¿cómo estáis llevando eso?
R: Al final yo creo que es lo que conlleva subir de categoría y nivel. No puedes querer jugar siempre cerquita de casa. La Primera RFEF es mejor categoría que la Segunda B y este es el precio que hay que pagar. Nosotros esta semana jugamos en Girona ante el Costa Brava y tenemos que coger avión y es un viaje que nunca hubiésemos hecho antes. Hay que adaptarse porque tiene su dificultad pero es bonito. Estamos más cerca de la Segunda División que antes. Los futbolistas intentamos llevarlo bien.
Sabemos que para hacernos fuertes y competir ante equipos de mayor presupuesto tenemos que ser excelentes en defensa.
P: Llega el choque ante el Costa Brava pero el equipo fuera de casa aún no conoce la victoria y eso pasa por la fortaleza defensiva, ¿cómo se vive eso desde la portería?
R: Desde que llegué a la Balona se ha trabajado muy bien en lo defensivo pero este año no nos queda otra. Tenemos a Romerito de míster, que fue central, el segundo es Fernando Niño que ha sido central, también está Carlos Guerra que fue central de la Balona mucho tiempo. No queda otra. Sabemos que para hacernos fuertes y competir ante equipos de mayor presupuesto tenemos que ser excelentes en defensa. Quitando el choque ante el Algeciras estamos haciendo las cosas bien en lo defensivo. Ahora jugamos contra el Costa Brava, que no lo está pasando bien, pero nuestro objetivo es alargar la mala racha. Aún no hemos ganado fuera de casa y tenemos que exigirnos más.
P: Este año ha habido cambio en el banquillo, ¿qué os pide Romerito cuando llega?
R: El míster es una persona muy clara. Tiene una personalidad muy fuerte y quiere que el equipo transmita eso. Es una persona intensa y quiere que el equipo sea sólido, vertical, sin miedo a presionar y que con balón sepamos que hacer. Él quiere que tanto en defensa como en ataque tengamos las cosas claras. Confiamos en él y vamos todos a una.
P: El equipo se encuentra fuerte en su feudo, ¿cómo vivís y valoráis el apoyo de la afición?
R: Al final en todos los sitios está pasando que fue duro porque las aficiones no estuvieron en la grada. Está el plus de que vienen equipos que nunca han venido, como el Real Madrid Castilla. Lo que se vivió ante el Castilla o el Algeciras fue un lujo. Es clave para el fútbol que haya aficiones fuertes.
P: La Balona es un club muy familiar, ¿cómo se vive el día a día en el vestuario?
R: La Balona es un club peculiar. Es un club humilde que hace las cosas muy bien. Es un histórico que llevaba años en la Segunda División ‘B’ y que ahora está presente en la Primera RFEF. La familiaridad del club se pasa al vestuario y tenemos un grupo espectacular. Solo puedo decir cosas buenas desde que estoy aquí. Hemos mantenido el grueso de la plantilla y eso ha ayudado para que el buen ambiente dentro del vestuario se vea reflejado en el verde.
Necesitamos a todos para hacer un año bonito y son claves para nosotros.
P: Por último, ¿qué le dirías a la afición de la Balona?
R: A la afición le diría que tiene que seguir ahí, en las buenas y en las malas. Que deben animarnos cuando las cosas vayan bien y empujarnos cuando no salgan las cosas. Hay que ser exigentes porque es la misma exigencia que queremos nosotros. Buscamos que ellos estén contentos y que exista una comunión entre jugadores y aficionados. Necesitamos a todos para hacer un año bonito y son claves para nosotros.