Hay conflicto entre varios clubes de balonmano y la ASOBAL. La salida del Barça y del Ciudad de Logroño de la Asociación de Clubes de Balonmano, ha hecho que se tambaleen los cimientos del balonmano español. Por cierto, el próximo año se celebra en Torrevieja un Mundial Balonmano Femenino.
El problema parece encontrarse en torno a la figura del actual presidente de la ASOBAL, Adolfo Aragonés. Ya a finales de mayo junto a Barça y Ciudad de Logroño, otros cinco clubes Bidasoa-Irún, Anaitasuna, Huesca, Granollers y Benidorm pidieron en una carta la dimisión del presidente que había sido reelegido el pasado 7 de marzo para estar cuatro años más en el cargo.
El BM Benidorm junto a Barça, Ciudad de Logroño, Bidasoa-Irún, Anaitasuna, Huesca, y Granollers pidió la dimisión de Aragonés
Las causas han sido la falta de transparencia e información de Aragonés, la inacción de la ASOBAL durante el periodo de confinamiento por la pandemia del coronavirus y provocar la división entre los asociados, según lo experesan los clubes en la carta.
Todo esto desencadenó en que el Barça y el Bidasoa-Irún firmaran una propuesta para eliminar el requisito de ser socios de ASOBAL para jugar la Liga, que fue aprobada en la Asamblea de la Federación Española el pasado 13 de junio. Por lo que el equipo catalán y el riojano han anunciando que se daban de baja como socios.
Fue aprobada la propuesta de eliminar el requisito de ser socio de ASOBAL para jugar la Liga
«Si el presidente hubiera dimitido no nos habríamos ido, porque la Asociación tiene viabilidad y se podría impulsar un proyecto más creíble», argumentaba David Barrufet, mánager del Barça.
Ahora, Aragonés va a recurrir esta decisión al CSD para frenar las posibles pérdidas de la ASOBAL. Ya que, en este momento, los clubes pueden jugar la Liga sin ser socios, lo que implicará muchos cambios a nivel de patrocinadores, televisión y el canon que se paga a la Asociación.