Tras la dura derrota del Salamanca CF UDS frente al Bergantiños (1-5), Martín Galván ha emitido un mensaje público pidiendo disculpas por el gesto que realizó tras marcar el único gol de su equipo. El jugador se llevó el dedo a la boca para mandar callar a la afición, lo que desató una fuerte reacción en el estadio Helmántico.
Galván mandó un mensaje pidiendo disculpas y asegurando que la situación le afecta personalmente
En un vídeo difundido por el club en redes sociales, Galván explicó que su gesto no fue dirigido a toda la afición, sino a un grupo específico de personas que lleva tiempo insultándolo tanto en el estadio como en redes sociales. Aclaró que la situación lo afecta personalmente, ya que su familia, presente en las gradas, también escucha esos insultos: «Mi hija me pregunta por qué me dicen esas cosas y no sé qué responderle».
Pedir perdón por la imagen de ayer,sabemos que este no es el camino🙏, tenemos que estar más unidos que nunca y trabajar para estéis orgullosos,estoy a muerte con esta plantilla y confío en cada uno de mis compañeros,necesitamos el apoyo de todos! Hala Unión 🤍🖤@SalamancaCFUDS pic.twitter.com/wtiNkl5WXp
— Antonio Amaro Mendo (@AntonioAmaro8) October 7, 2024
El jugador, visiblemente afectado, destacó que su reacción fue fruto de la frustración acumulada por los malos resultados del equipo y por un mal día en el que «nada salió». Con sinceridad, pidió disculpas a los aficionados y aseguró que no volverá a ocurrir: «Sé que tengo que ser más fuerte y aguantar, pero quería que entendieran la situación que vivo día a día».
Galván concluyó su mensaje haciendo un llamado a la unidad y prometió dar lo mejor de sí para ayudar al equipo a salir de esta complicada situación.
Mensaje de @MartinGalvan29 para la afición del 𝐒𝐚𝐥𝐚𝐦𝐚𝐧𝐜𝐚.
¡𝐔𝐍𝐈𝐃𝐎𝐒! 🤍#ElDespertarDeLaUnión pic.twitter.com/WtxadUnH18
— Salamanca UDS (@SalamancaCFUDS) October 7, 2024
Declaraciones completas de Martín Galván:
«Hola, afición. Quise hacer este video para explicar un poco lo que pasó ayer y también para pedirles unas sinceras disculpas. Lo que pasó fue un gesto en el que me equivoqué porque parece que estoy generalizando, que estoy haciendo ese gesto para toda la gente, pero no es así. Ese gesto me salió porque vengo arrastrando una situación desde hace tiempo, donde hay ciertas personas que se meten conmigo directamente con insultos en redes sociales partido tras partido, cada vez que toco un balón. Es complicado, porque esa gente no entiende que en la grada están mi esposa y mis hijos, y que no es justo para ellos escuchar todo eso. Mi hija me pregunta: ‘Papá, ¿por qué te dicen todo eso?’ y no sé qué responderle.
Por eso reaccioné así ayer, sumado a que todos tuvimos un mal día en donde nada salió bien. Más las pulsaciones y lo que traía en la cabeza, fue que reaccioné así. Simplemente, disculparme de verdad. No volverá a suceder. Sé que tengo que ser más fuerte y aguantar muchas cosas, pero quería que ustedes también supieran lo que uno vive día a día. Lo que a uno le cuesta estar hoy en día compitiendo.
Por ejemplo, llevo sin ver a mis padres más de un año porque me quedé en Salamanca para recuperarme de mi pierna y poder estar a tope en la pretemporada. Son muchas cosas que por eso a veces es complicado quedarse callado o aguantar. Así que nada, de verdad espero que todo quede en un malentendido, en un calentón y en un mal día que tuvimos todos. A partir de ahora, tirar para adelante que creo que es la única opción para que todos podamos volver a donde nos merecemos. Gracias por siempre apoyar y estar ahí. Lo siento mucho.»