El pasado domingo en la segunda parte del partido entre el Hércules CF y el Lleida Esportiu, cuando el equipo blanquiazul ya perdía por goleada y se quedaba en zona de descenso a Tercera en la tabla, la grada comenzó a mostrar su enfado por la situación de su equipo.
El Hércules CF condena las actitudes violentas del pasado domingo y expone que la dirección está «planificando la toma de decisiones técnicas para mejorar la prestaciones deportivas»
Un grupo de aficionados se desplazaron de sus asientes para acercarse al palco y protestar directamente ante los consejeros y representantes de la entidad. En los videos que han publicado varios medios de comunicación y los propios aficionados en redes sociales se observaba a varios aficionados acercándose al palco donde tuvo que aparecer la Policía para evitar cualquier problema mayor. De fondo los gritos de gran parte de la grada: «Directiva Dimisión».
El club ha reaccionado este martes a lo sucedido el domingo con un comunicado oficial donde expresa «el más profundo rechazo y condena las actitudes violentas demostradas por una decena de asistentes al encuentro que obligaron a intervenir a los integrantes de los servicios de seguridad y a la Policía Nacional».
COMUNICADO OFICIAL DEL HÉRCULES CF:
Ante los graves incidentes ocurridos durante la finalización del partido entre nuestro equipo y el Lleida Esportiu el pasado domingo 27 de noviembre, el Hércules de Alicante CF quiere expresar su más profundo rechazo y condena por las actitudes violentas demostradas por unas decenas de asistentes al encuentro que obligaron a intervenir a los integrantes de los servicios de seguridad privada del club y a los miembros de la Policía Nacional presentes en el Estadio José Rico Pérez.
La dirección del club está en la actualidad planificando la toma de decisiones técnicas destinadas a mejorar las prestaciones deportivas del primer equipo con el objetivo de alcanzar las metas señaladas a principio de temporada. Sin embargo, determinados comportamientos violentos deben ser erradicados de nuestro deporte. El club -que respeta produndamente la libertad de expresión canalizada a través de cualquier medio- considera que los hechos extradeportivos que acompañaron al partido en cuestión no deben repetirse jamás ni en el nuestro ni en ningún otro estadio de fútbol. Poner en peligro la identidad física de los aficionados presentes en el estadio y en este caso en el palco de autoridades, algunos de ellos menores, y vincular este tipo de acciones al malestar por la marcha del equipo es una práctica absolutamente reprochable y totalmente alejada de los valores del deporte y el respeto a los demás.