Cuando un equipo llega a una división nueva como recién ascendido siempre tiene la disyuntiva de si ha de mantener a la mayoría del bloque o reforzarse. Los jugadores que tenías la temporada pasada son los que te han llevado hasta la nueva categoría, pero es un hecho que en la inmensa mayoría de las ocasiones con el salto de nivel se necesita a jugadores más experimentados.
es difícil prescindir de alguno de sus futbolistas, ya que todos han rayado la excelencia
En el caso del Barakaldo CF, están realizando una mezcla entre ambas situaciones. El conjunto vasco ascendió a Segunda Federación con una holgura impropia, ya que no registraron ni una sola derrota en toda la fase regular, ni cuando ya estaban ascendidos matemáticamente. De esta manera, es difícil prescindir de alguno de sus futbolistas, ya que todos han rayado la excelencia.
La fortaleza del equipo siempre estuvo en el entramado defensivo. Tan solo encajaron 11 goles en 30 partidos, y así se convirtieron en el equipo menos goleado de los 18 grupos de Tercera Federación. Con estos guarismos, prácticamente te aseguras un punto por partido, pero es que encima anotaron 67 goles, por lo que el número de victorias también se disparó: 23 de 30.
Y para ganar estos partidos lo que más se necesita es a jugadores que transformen las ocasiones en goles. En el caso del Barakaldo CF, ya han confirmado que no van a dejar escapar a su killer, y es que Íñigo Orozko renovará una temporada. De esta manera, el conjunto vasco ata a su máximo goleador de cara a su participación en Segunda Federación.
Con 10 goles en 26 partidos, ha sido un auténtico dolor de cabeza para todas las defensas del Grupo IV en Tercera RFEF. Para Imanol de la Sota ha sido la punta de lanza perfecta en un equipo que funcionaba sin fisuras y que confiaba en sus cualidades para ganar los partidos. El año que viene, seguirá siendo así, pero esta vez en Segunda Federación.