No llegó el resultado esperado tras la victoria 2-0 de Catalunya ante Madrid. La Selección Valenciana quedó eliminada de la Copa de las Regiones UEFA pese a haber firmado dos actuaciones convincentes y un nivel competitivo que, según su seleccionador, mereció más. Andrés Palop, que debutaba al frente del combinado autonómico, transmitió tras el choque frente a la Comunidad de Madrid una mezcla de orgullo, frustración y convicción en el potencial del equipo.
Un partido dominado… y una victoria que nunca llegó
La Selección Valenciana había sido muy superior ante Madrid. Dominó en posesión, en juego exterior, en llegadas y en ocasiones claras, pero encajó un gol aislado en la única aproximación madrileña. El tanto de Fran García en el minuto 93 solo sirvió para empatar y dejó la clasificación en manos de lo que sucediera el domingo entre Catalunya y Madrid.
Palop, sin embargo, insistió en que el rendimiento estuvo muy por encima del marcador. “Estoy muy orgulloso de esta plantilla. Lo han dado todo y han hecho un partido para ganar, y no por un resultado mínimo, sino con diferencia”, afirmó. Para él, el equipo mostró una versión “madura, valiente y reconocible”, capaz de desarbolar a su rival durante largos tramos del encuentro.
“Dolió no ganar, pero no se puede quitar mérito a lo que ha hecho esta selección”
El seleccionador no escondió su desilusión por la falta de acierto, el único elemento que, según él, separó a la Valenciana de un triunfo claro. Enumeró llegadas interiores, situaciones por fuera, centros laterales, segundas jugadas, rechaces que no cayeron favorables y hasta un larguero. “Lo habíamos hecho todo para ganar”, lamentó.
La ansiedad por el paso del tiempo y por la acumulación de oportunidades falladas también influyó en el tramo final. Palop habló de precipitaciones, de querer llegar demasiado rápido y de la importancia de mantener la mente fría en contextos de dominio total en los que el gol se resiste.
Un equipo que merecía más recorrido
Más allá del partido, las palabras del seleccionador transmitieron la sensación de que esta eliminación ha cortado un camino que podía ser largo. Habló de un grupo “muy bueno”, con hambre, cohesión y capacidad para asimilar mecanismos cada vez más complejos con el paso de las sesiones. “Si hubiéramos pasado esta primera fase, creo que podíamos llegar lejos”, aseguró.
La derrota de Madrid ante Catalunya lo confirmó: la Selección Valenciana se queda con dos puntos, dos empates y la convicción de haber sido competitiva de principio a fin. Para Palop, esa es la base sobre la que debe construirse el futuro del combinado autonómico.
El torneo continúa sin la Comunitat Valenciana, pero la sensación que queda es la de un equipo que no cayó por juego, sino por los centímetros que en el fútbol separan el acierto de la decepción.