Si a algún aficionado le das a elegir la forma de subir, muchos hubiesen firmado la del cuadro albirrojo. El guion de la temporada 2020/2021 no cabe duda de que lo ha firmado un seguidor del Algeciras CF. El conjunto dirigido por Salva Ballesta ha sido uno de los equipos destacados en la categoría de bronce y el domingo, en el derbi del Campo de Gibraltar, sellaba su pase a la 1ª RFEF con un gol en el descuento.
Los algecireños entraban en pocas quinielas al principio de temporada, pero a base de fútbol han destrozado todos los esquemas. En un grupo con muchos nombres y grandes proyectos los pupilos de Salva Ballesta han rozado la perfección. Los albirrojos firmaron una primera vuelta histórica con tan solo una derrota -en el último partido ante el Sanluqueño- y en la segunda vuelta han conseguido superar baches para abrirse paso en la nueva categoría del fútbol nacional.


Desde el club le dieron continuidad al proyecto comandado por Salva Ballesta y acertaron de pleno. El técnico maño ha dotado al equipo de una personalidad propia y un hambre que le han hecho superar los malos momentos. También sobreponerse a las bajas, algunas tan sonadas como la de Juan Serrano, quien hizo las maletas hacia el filial del Betis en el mercado invernal. Salva Ballesta mezcló en sus onces juventud y veteranía y la jugada no le ha podido salir mejor.
Ante el eterno rival, a domicilio y con un gol en el descuento cuando todo parecía desembocar en un empate. El Algeciras conquistó La Línea y la celebración en el campo estuvo a la altura de la gesta conseguida. Lágrimas de alegría, cánticos y muchos abrazos, esos que tanto hemos echado de menos durante este año de pandemia. El cuadro algecireño hizo retumbar los cimientos del Municipal de La Línea en un día que quedará marcado para siempre en el corazón de los allí presentes.
El primer objetivo ya está conseguido, pero en Algeciras quieren más. Tras dos días de descanso los chicos de Salva Ballesta han vuelto hoy al césped. Y en la mente de todos y cada uno de ellos este es el primer paso. Los albirrojos disputarán la fase de ascenso a Segunda División con la moral por las nubes. Y tienen en sus botas seguir firmando páginas de oro en la historia del club. Otra cosa no, pero en Algeciras tienen licencia para soñar.