El lanzamiento desde los once metros decide partidos. Aquel discurso de que las tandas de penaltis eran poco menos que lanzar una moneda al aire se ha quedado anticuado. ‘La suerte de los penaltis’. Así lo conocíamos. Hasta que llegó Sergio Ramos, que nos demostró a la gran mayoría de los amantes del fútbol que todo tiene un proceso de aprendizaje. A veces es más corto, y otras más largo. Lo que está claro es que el fallo duele, y las heridas solo se curan a base de trabajo.
El capitán del Real Madrid se puso manos a la obra y es ahora uno de los mejores lanzadores del fútbol mundial. ¡Y siendo central! Sorprende que en la élite, repleta de grandes jugadores de ataque acostumbrados a definir de cara a puerta, haya sido un central quien se haya convertido en uno de los referentes de esta disciplina. Aunque si apartamos la vista del foco mediático y contemplamos Madrid desde otra perspectiva, veremos también a otros zagueros que han asumido la responsabilidad desde el punto fatídico.
Manu Jaimez, jugador del CDA Navalcarnero, equipo de Segunda División B, es el alumno aventajado de ‘El camero’. El comandante rojiblanco no ofrece dudas en el cara a cara con el portero rival. Cuando uno de sus compañeros es derribado en el interior del área y el colegiado señala pena máxima, él automáticamente se adueña del balón y pone toda su atención en el disparo. El madrileño no es brillante en lo técnico, pero sí en otros aspectos como la concentración y el atrevimiento. Tal es su confianza en esta materia que incluso se aventura con tiros poco comunes como, por ejemplo, el de sin carrerilla.


Una categoría más abajo, en Tercera División, descubrimos a más defensas especialistas. Uno de ellos es José Ángel, integrante del Móstoles CF con pasado en la cantera madridista. El jugador de 24 años está en su plenitud futbolística y, además de haber sido indiscutible para Popler y Jesús Lucas durante la temporada, se ha destapado como un tirador de garantías. No hay penalti que se le resista. Antes de comenzar la presente campaña, el conjunto azulón se midió a la AD Complutense para decidir quién de los dos se proclamaba supercampeón de la Regional Preferente. El encuentro llegó a los penaltis, y José dejó pistas de su puntería.
Agarró el balón y, con la seguridad que le caracteriza, mantuvo la buena línea de los suyos en la tanda. Aunque si aquello fue digno de elogio, todavía lo es más su 2021 desde los once metros. En el partido que enfrentó al Móstoles CF con la AD Parla en el Andrés Torrejón, el madrileño lució sus galones y marcó el definitivo 4-3 para su equipo. Este pasado domingo, en un duelo crucial por la permanencia, volvió a repetir hazaña. Penalti a favor y gol que a la postre le daría tres puntos importantísimos a su equipo.
Tampoco se queda atrás Boriba que, además de ser el máximo goleador de su equipo junto a Raúl Julià, se ha ganado el respeto de su afición y de sus compañeros por cosas como las de la última jornada. El ecuatoguineano tiró con fe para adelantar a los suyos justo antes del descanso. Ese 1-0 se mantuvo hasta el 90′ y el CD El Álamo se llevó los tres puntos ante el CD Paracuellos Antamira, rival que de haber ganado se habría distanciado aún más en la lucha por la salvación.