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El milagro orellut tiene nombre y apellidos

Pablo Hernández Domínguez. Con nombres y apellidos, el otrora futbolista de Valencia, Swansea, Rayo Vallecano, Getafe o Leeds, entre otros, es la persona que ha devuelto la ilusión a los aficionados del conjunto castellonense. Su victoria en Riazor, donde nadie lo había conseguido en lo que llevamos de temporada, coloca a los suyos a tan solo cuatro puntos del ascenso directo.

La directiva del club, ahora sí, puede estar satisfecha con la decisión arriesgada que llevó a cabo el pasado 16 de septiembre. Tras la disputa de las cinco primeras jornadas ligueras, el club dio un giro de timón con la destitución de Johan Plat y la subida al primer equipo de Pablo Hernández, quien la pasada campaña hizo historia con el filial consiguiendo el ascenso a Segunda Federación.

DESDE LA LLEGADA DEL TÉCNICO SUMAN 26 DE 36 PUNTOS POSIBLES

Tras sumar solo dos puntos de los primeros quince posibles, la llegada de Pablo Hernández -de forma interina- cambió todo. Sus buenos números hicieron que el club le ratificase como técnico del primer equipo y desde su llegada al banquillo suma 26 puntos de 36 posibles con un balance de 8 victorias, 2 empates y 2 derrotas -ante Albacete y Almería, ambas por la mínima-.

Su único borrón desde su llegada al banquillo del primer equipo llegó en Copa del Rey, cayendo ante el Antoniano en la primera ronda. Pese a ello el Castellón es el equipo más en forma de la categoría desde la llegada de Pablo Hernández, con puntuación de ascenso directo. Una apuesta arriesgada que, de momento, ha dado un resultado inmejorable. El Castellón quiere seguir soñando bajo la tutela de Pablo Hernández.

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