El Valencia vive una crisis deportiva y institucional, que se ha vuelto a desencadenar a lo grande tras un mes de enero donde el equipo ha quedado eliminado de la supercopa de España, de la Copa del rey, tras un humillante partido en Mestalla ante el Athletic, y en la Liga ha acumulado tres derrotas y un empate desde que se reiniciara la competición tras el parón por el mundial. El equipo de Gattuso cayó ayer en Valladolid en un partido en el qué ya se vio un equipo ansioso por qué no gana nadie, y metido en el fango de la pelea por el descenso, con un punto más que el Cádiz, que es el primer equipo que bajaría segunda división.
El refuerzo de la figura de Gattuso hay que cogerlo con pinzas, porque pese a que en este club molesta mucho, la realidad indica que las decisiones no se toman en Valencia
Tras esa derrota, en Zorrilla, el Valencia de Valencia, es decir, la gente que trabaja en el día día del club en la ciudad de Valencia, se apresuró a asegurar desde el mismo estadio pucelano, que había total confianza en la figura del entrenador italiano y que en ningún caso, se estaba valorando su destitución . Desde el club, se quiso reforzar a un entrenador que ahora mismo está totalmente superado por la situación y que, como él mismo reconoce, está intentando variar su modelo de juego, pero el equipo no responde y sólo pierde partidos.
El refuerzo de la figura de Gattuso hay que cogerlo con pinzas, porque pese a que en este club molesta mucho, la realidad indica que las decisiones no se toman en Valencia, sino en Singapur. Y por tanto, no sería la primera vez que desde Valencia se defiende una cosa que a las horas es totalmente la contraria, porque Peter Lim, toma una decisión totalmente contraria a la que se defienden Valencia desde su sillón de mando asiático. Gattuso ha ido viendo como se le cae el equipo poco a poco, y si no fuera por la victoria que logró en la última jornada antes del mundial frente al Betis, que sirvió para maquillar una racha que ya daba pistas del derrumbamiento del equipo el equipo, estaría seguramente ya en puestos de descenso. Porque en las últimas diez jornadas de Liga el Valenciac únicamente ha ganado un partido y ha sumado seis puntos. Esas son cifras de equipo de descenso y de destitución fulminante no en el Valencia, sino en cualquier equipo.
A todo esto desde la entidad, se han pasado mirando el mercado los dos últimos meses y sin ser capaces de reforzar una plantilla que pide a gritos experiencia y oficio. Esa palabra que tanto utilizó en el pasado el ex entrenador José Bordalás. La juventud en momentos como el que vive ahora el Valencia es más un enemigo que un aliado, y el club ha sido incapaz de tomar decisiones y de firmar futbolistas que hubieran ayudado al equipo ya durante todo el mes de enero.
el club intentará firmar a Saúl Ñíguez y seguramente también a un jugador de banda, pero este tendrá que ser con una ficha mucho más baja que la del mediocentro, Ahí encaja Pellistri
En estos últimos dos días del mercado, el club intentará firmar a Saúl Ñíguez y seguramente también a un jugador de banda, pero este tendrá que ser con una ficha mucho más baja que la del mediocentro. Ahí encaja el uruguayo del United Pellistri, pero la gran prioridad se centra en el medio centro, es el alicantino del Atlético de Madrid.
El Valencia, contacto a través del propio Gattuso con Saúl a principios del mes de enero, pero su altísima ficha casi, casi descartó su llegada. Sin embargo, los pocos minutos de Saúl en el Atleti han activado esta operación en los últimos días, porque ha sido el propio futbolista el que ha abierto la puerta a su posible salida, ya que no se siente importante en el Atlético y ha sido él el que le ha pedido al club madrileño que le deje salir cedido.
Su gol de ayer en Pamplona podría hacer saltar por los aires una operación en la que el Valencia tenía la confianza de poder cerrar un futbolista de experiencia en la Liga, que ayude al centro del campo de Gattuso. Porque el Cholo Simeone, rara vez deja salir a un futbolista aunque juegue poco a mitad de temporada, ya que suele ser previsor ante posibles lesiones o sanciones. Sin embargo Saúl parece tener la decisión firme de intentar venir a jugar al Valencia 18 meses porque esa es la operación que ha pedido el jugador, que sean 18 meses porque para cinco no desmonta su casa en Madrid, ni busca un nuevo destino en el que volver a sentirse un futbolista importante en la Liga española.
La negociación en los últimos días ha ido avanzando, pese a que todavía existían diferencias económicas, pero estas estaban solventando, porque el Atlético de Madrid veía una solución interesante de año y medio con un jugador que no es importante para el entrenador y que tiene un salario altísimo. El jugador está dispuesto a perder dinero para venir al Valencia.
En el día de hoy está prevista una reunión en la capital de España en la que se definirá si realmente el último día y medio de mercado se puede hacer o no esa operación. En esa reunión de hoy, Saúl tiene que conseguir luz verde definitiva por parte de Simone para poder salir del Atleti cedido este mes de enero. El agente del jugador estuvo ayer en el palco del José Zorrilla.
