Después de una inmensa temporada en el Grupo VII de la Primera Regional durante la campaña 2018/2019, el CFC Benidorm finalizó líder de su liga con 63 puntos y dos por encima del segundo clasificado. Un puesto que le dio el privilegio de ascender directamente a la Regional Preferente sin tener que pasar por el play off.
Sin embargo, los de Benidorm llegaron a la categoría con la idea de sorprender a más de uno y consolidarse en el siempre complicado Grupo IV. Para ello, eran conscientes del trabajo que tenían por delante y comenzaron a planificar la plantilla de la mejor forma posible para arrancar el curso con las máximas garantías.
Se convirtieron en uno de los dos filiales que tiene el CF Intercity
En este sentido, se convirtieron en el filial de uno de los equipos de moda en el fútbol valenciano como lo es el CF Intercity. Esto le permitió recibir la cesión de jóvenes jugadores con un alto nivel de calidad, que sumado a los que ya contaban con experiencia contrastada lograron formar un grupo sólido.
De esta manera, la plantilla del CFC Benidorm fue dando sus frutos y se han logrado colocar en una zona cómoda de la clasificación. Tras las primeras 26 jornadas y justo cuando se llega al parón obligado por el coronavirus, los benidormíes son décimos con 34 puntos en ese overbooking de equipos que hay en la zona media.
Se han consolidado en la zona media del Grupo IV
No obstante, su último encuentro se saldó con derrota en casa ante el CD Murada. Por lo tanto, cuando se reanude la competición, buscarán volver a la senda de la victoria y seguir con su buena dinámica, aunque para ello deberán derrotar a un combativo Universitat d’Alacant.