El solitario gol de Pep Asensi, en el minuto 56, dejó otros tres importantes puntos en El Perdiguer en la matinal dominguera, para que los de Ricardo Venancio continúen en la pomada. Disputado e intenso fue el choque ante un colista Discóbolo-La Torre que presentó batalla hasta el pitido final. Reportaje Fotográfico: Eleuterio Sánchez.
Tras los primeros instantes de tanteo, el Discóbolo dispuso a los cinco minutos de la primera clara ocasión que se vio en el encuentro. A raíz de la prolongación de una falta, el balón le quedó suelto a Adrián a la derecha del área y, solo ante la puerta, cruzó su chut demasiado. El Juventud-Barrio del Cristo lanzaba sus primeras ofensivas atacantes, pero la defensa franjirroja resistía con orden las acometidas locales sobre el área. El conjunto de La Torre volvió a avisar en una pérdida de balón por parte anfitriona, Alejandro avanzó con el esférico, abrió a la izquierda y la internada de Sofiene terminó con un disparo que forzó el córner. Otro chut a botepronto del visitante Eduardo puso en aprietos al meta Tatun, que intervino para enviar el cuero de nuevo a saque de esquina. En la otra parte del campo, varias incursiones peligrosas de los de casa acabaron en posición de fuera de juego y así los del Barrio del Cristo no encontraron el camino en el primer acto en una soleada matinal en El Perdiguer.
En la reanudación, el conjunto de Venancio salió al verde inclinando más el juego hacia la parcela rival. De tal forma que tras advertir el peligro Llácer, a los once minutos, en el golpeo de una falta que dio en la cepa del poste izquierdo de la portería, vendría a renglón seguido el gol, en ese minuto 56 y en el ataque siguiente. El delantero Pep Asensi encaró en el uno contra uno y resolvió con acierto ante la salida del meta José Luis. Más cómodo con el marcador a favor, el equipo del Barrio del Cristo hizo más daño ante un Discóbolo obligado a adelantar más sus líneas. Una buena contra local finalizó con un pase de Santacreu que no encontró por poco rematador. Los de El Perdiguer manejaban bien el juego en ese segundo periodo, para encontrar carril largo de proyección por la derecha de su ataque, como en una contra de Miguel, seguida de otra internada en solitario por la banda diestra a cargo de David que, ante la salida del portero, le elevó un balón que impactó en el travesaño. Otro centro a cuenta de Santacreu desde la derecha no lo conectó por centímetros Juanjo en boca de gol.
El resultado se antojaba corto para los merecimientos locales en el segundo acto. Si bien es verdad que el Discóbolo volvería a inquietar en el tramo final del partido y los locales vieron peligrar su victoria. Atacaron los de José Luis Barriga con un testarazo de Pablo a los dominios de Tatun. También a balón parado, en el minuto 86, la tuvo Manuel para haber podido empatar, pero su disparo en posición óptima ante la puerta de Tatun fue neutralizado y la jugada acabó en córner. En el 88, el propio Manuel vio la expulsión tras una entrada sobre el defensa Barberá y el Discóbolo acabó en inferioridad. Aun con ello, los de La Torre dieron otro susto en el área local con un remate de Pablo y, ya a última hora, con una acción polémica en el área del Barrio, protestada por los visitantes. El Juventud aguantó el arreón final del Discóbolo y al cabo esta nueva victoria le permite sumar y seguir para continuar instalado en la zona noble.
Un Juventud-Barrio del Cristo que se sitúa con 34 puntos y que empata provisionalmente con el tercer puesto de promoción, a la espera de los demás resultados por parte de los implicados en la parte alta de la tabla. La próxima jornada los de Ricardo Venancio visitarán a un rival directo, el Utiel. Por su parte, el Discóbolo-La Torre, que seguirá con 8 unidades en la última posición, recibirá la venidera jornada al Atlético Benimar Picanya.