El Almazora consiguió una balsámica victoria a costa de un Onda que continúa sin ganar ni ofrecer buenas sensaciones en un inicio complicado. Los blanquinegros se avanzaron en el marcador en el primer acto con un disparo cruzado de Fran Martínez y, al borde del descanso, una genialidad de Pinazo a balón parado duplicó la ventaja visitante. En la reanudación los locales se mostraron voluntariosos pero encajaron el tercer tanto, obra de Joel Melgarejo de vaselina. No obstante, los ondenses mantuvieron la esperanza con una rápida respuesta de Juancho, que colocó el 1-3, a la postre definitivo. Reportaje Fotográfico: Jorge Sastriques.
La Serratella era testigo de un duelo de exigencias entre dos clásicos de la provincia de Castellón. Onda y Almazora, ambos llamados a disputar la promoción de ascenso a Tercera División, estaban lejos de los puestos nobles de la tabla. Los ondenses llegaban decimoterceros con seis puntos, a ocho del play-off y con solo uno de ventaja respecto al descenso, después de conseguir una sola victoria en seis jornadas, una circunstancia que provocó esta semana la destitución del técnico Jacint Guimerá. No estaba mucho mejor el cuadro del Pesudo, que era décimo con ocho puntos, a seis del tercer puesto, tras acumular cuatro partidos sin conocer la victoria.
Basilio López, en su debut como técnico del Onda, empleó de inicio un 4-2-3-1, con Villarrubia, Álvaro Gómez, Marcos Bou y Fran en defensa; Ripo y Tali en el doble pivote, tres mediapuntas con Molina y Jesús López en bandas y Pascu de enganche; y Juancho como única punta de ofensiva. En cambio, Francisco Javier Balaguer optó por un 5-4-1, con Guinot, Moya y Juaco en defensa y Pablo Revert y Miguel Bonell como carrileros; con Borja Quirant y Pinazo por dentro, Fran Martínez y Joel Melgarejo caídos a banda y Enric Martínez en ataque. El encuentro comenzó con una alta intensidad, y es que no era para menos, ambos equipos,a pesar de estar en la séptima jornada, llegaban al partido necesitados de puntos. El Onda intentó llegar a la meta visitante pero los de Balaguer se mostraron pétreos y apenas concedieron espacios.
Los blanquinegros se acercaron con peligro a balón parado pero el gol no llegó hasta el minuto 18, cuando Fran Martínez, de potente tiro cruzado, batió a Carlos Sabater con un tiro que primero golpeó en la madera. El tanto encajado espoleó a los rojiblancos, que tuvieron dos ocasiones, la primera en un chut de Jesús López y la segunda la segunda con un disparo de Adrián Villarrubia que despejó a córner Rubén Jiménez. Con más clarividencia atacó el Almazora, no en vano, Pinazo tuvo el 0-2 en sus botas en la recta final del primer tiempo, pero su disparo, desde fuera del área, los rechazó Sabater en una magnífica estirada. Pero el jugador del Almazora se resarció, vaya si lo hizo, y es que al borde del descanso materializó el 0-2 con un golazo excelso de falta.
El Onda necesitaba soluciones y Basilio López dio entrada a Dídac por Ripo para jugar con dos delanteros con un 4-4-2. Lo cierto es que en la reanudación los locales apretaron, Álvaro Gómez la tuvo a balón parado y, en especial, Molina pudo recortar diferencias con un tiro cruzado que abortó un zaguero contrario en la misma línea de gol. Ante este escenario Balaguer optó por aportar más músculo a la medular de su equipo y metió a Pablo Llorens en sustitución de Pinazo. Pero lejos de meterse en el partido los almazorenses sentenciaron con el tercer tanto, obra de Joel Melgarejo, que batió a Sabater de vaselina.
Pero cuando parecía todo perdido para los locales, Juancho volvió a reavivar la llama de la ilusión en la grada de La Serratella al conectar un balón de Dídac desde la banda izquierda para poner el 1-3. A pesar de estar todavía lejos del empate, el tanto estimuló al Onda, los de Basilio apretaban y Pascu estuvo cerca de hacer subir el 2-3 en el electrónico con un disparo lejano de Pascu que se estrelló violentamente en el larguero. El contexto se le complicaba a los de Balaguer sobre el terreno de juego, todavía no en el marcador, por ello el técnico blanquinegro optó por dar más poderío ofensivo a su equipo para sentenciar el duelo, las entradas del incisivo Raúl Moliner y el ariete Pau así lo atestiguan. Pero los del Pesudo pudieron terminar de definir el choque en un chut de Borja Quirant que sacó, de forma casi milagrosa, Carlos Sabater. Pascu volvió a tener una gran ocasión desde fuera del área para recortar diferencias, pero el balón no encontró portería. Lo cierto es que los rojiblancos jugaban con mucha fluidez en la zona ancha, Balaguer movió ficha y dio entrada al incombustible Amine.
Este triunfo sitúa a los de Balaguer a tres puntos de los puestos de promoción de ascenso, todo lo contrario que un Onda que se mantiene a un punto de la zona de descenso a Primera Regional. En la próxima jornada el Almazora recibirá al Nules en el José Manuel Pesudo, mientras que los de Basilio López se desplazarán hasta el Javier Marquina del Grao de Castellón para enfrentarse al San Pedro.
