Jornada 10.- Villarreal CF, 4; Deportivo Alavés, 1.
El Villarreal suma y sigue. Segunda victoria consecutiva y tercera en La Cerámica, ante el verdugo número uno del Submarino, el Alavés. Los vitorianos habían ganado en el coliseo amarillo en sus últimas tres visitas pero esta noche sucumbieron. Un doblete de Toko Ekambi, que apareció cuando más se le necesitaba, para abrir la lata y luego para volver a poner por delante a los suyos en la segunda mitad tras el golazo de Lucas Pérez. En la recta final, en un epílogo similar al del duelo ante el Betis, Gerard Moreno, máximo goleador de la liga junto a Loren, previa asistencia de Santi Cazorla, y Ontiveros, de falta, terminaron de cerrar la goleada. Foto: LaLiga
Javi Calleja calcó prácticamente el mismo once inicial que superó al Espanyol a domicilio la pasada semana. El Submarino, con la única variante obligada por lesión de Mario Gaspar por Rubén Peña, salió de inició con un 4-1-4-1, con Sergio Asenjo en la portería; la novedad de Mario Gaspar en el lateral derecho, Alberto Moreno en el izquierdo, y Raúl Albiol y Pau en el eje de la zaga. Vicente Iborra actuó de ancla, por detrás de Zambo Anguissa y Santi Cazorla, al que se le dispensó un homenaje por sus 300 partidos como amarillo, al igual que al centenario Moi Gómez, que cayó a banda izquierda, Gerard Moreno actuó en la opuesta; y Toko Ekambi se situó como única referencia ofensiva.
Los locales llevaron la voz cantante desde el comienzo del choque, nada nuevo bajo el sol, ese era el contexto de partido esperado, con los amarillos controlando el choque desde la posesión y los contrarios encerrados y resguarnecidos atrás aguardando a salir a la contra. De ahí que no fue extraño que el cuadro de la Plana Baixa se prodigara más en ataque desde el comienzo. Zambo Anguissa, desde lejos, envió el cuero alto en el primer chut del envite, Santi Cazorla tuvo la segunda, la tercera fue dentro. Apenas se cumplían 13 minutos de juego cuando Toko Ekambi alcanzó un pase al espacio de Gerard Moreno, cerca de la medular, y protagonizó una potente cabalgada por banda derecha que terminó con una perfecta definición del camerunés, con la que batió al meta Pacheco con un tiro cruzado. Hubo VAR, suspense, y gol.
El tanto no hizo más que consolidar el dominio groguet. Cazorla pudo duplicar la ventaja en el marcador en una buena jugada colectiva, centro de Moi Gómez, tras un gran detalle individual, cesión con la testa de Gerard Moreno y cañonazo de Cazorla que atrapó Pacheco. El lateral izquierdo Alberto Moreno probó fortuna desde lejos y su durísimo disparo rozó la cepa del poste. Gerard Moreno también lo intentó desde fuera del área, tras una mala cesión de los visitantes, pero el ariete mandó el cuero desviado. Al Villarreal solo le faltaba el gol, y es que los de la Plana Baixa desarticularon a un Alavés que apenas propuso nada en el primer acto y no generó peligro.
Todo lo contrario que las huestes de Javi Calleja, que combinaban bien, desarbolaban a la zaga contraria y construían ocasiones para encontrar el segundo gol. Sin embargo, el Alavés reaccionó en la recta final del primer periodo, bien es cierto que no creó grandes problemas a Asenjo, pero sí que combinó con mayor fluidez en campo contrario y los atacantes Lucas Pérez y Joselu intentaron asociarse mejor. Pero ni por esas podía el cuadro vitoriano con el Submarino. Las últimas aproximaciones visitantes previas al descanso llegaron a balón parado pero se saldaron sin mayores consecuencias.
Pero quien perdona lo paga y eso le pasó al Villarreal en la reanudación. Los amarillos, que habían salido a un menor ritmo que una hora antes, vieron como Lucas Pérez, en una espectacular jugada acrobática en el interior del área, tras recoger un mal rechace de Albiol, lograba igualar el marcador. Por cierto, cuarta jornada marcando para el delantero gallego. El gol despertó a la bestia. El Villarreal puso la réplica pronto, lo hizo con un tanto de Gerard Moreno que se fue desviado por muy poco. Lucas Pérez volvió a marcar, previa asistencia con la testa de Joselu, pero el atacante albiazul arrancó en posición antirreglamentaria. Gol anulado pero susto local. Estaba más cómodo, más convencido de su juego el Alavés que los locales, todo en una segunda mitad en la que cambiaron las tornas y los vascos sufrieron una metamorfosis. Rubén Duarte volvió a poner a prueba a Asenjo con un chut desde fuera del área tras un córner.
Necesitaba un revulsivo el Submarino, le hacía falta un cambio, así lo entendió Javi Calleja, que retiró del terreno de juego a Zambo Anguissa para dar entrada a Samu Chukwueze, la explosividad del extremo nigeriano le podía venir bien al conjunto de la Plana Alta. El técnico madrileño cambió su dibujo táctico y pasó a jugar con un 4-4-2, con Chukwueze y Moi Gómez en bandas, Cazorla junto a Iborra en el doble pivote, y Gerard Moreno formando dupla atacante con Toko Ekambi. Duarte volvió a ser el azote groguet, pero en esta ocasión el cuero se le marchó alto al lateral zurdo. Pero los líderes están para algo, y Santi Cazorla es el estandarte del Villarreal. El asturiano estuvo a punto de volver a poner por delante a los suyos con un latigazo desde la frontal del área que terminó escupiendo el poste izquierdo de la portería babazorra. El empuje del capitán tuvo su fiel continuidad pocos minutos después. Alberto Moreno combinó con Moi Gómez en una pared que el de Rojales completó con un pase la muerte desde la banda izquierda que conectó a gol, a bocajarro, Toko Ekambi. Quinto gol en los últimos cuatro partidos para el punta africano y 2-1. La pesadilla del comienzo del segundo acto había pasado.
Pero el conjunto de Asier Garitano todavía no había dicho su última palabra, no en vano, primero Borja Sáinz, y después Burke, ambos recién ingresados en el terreno de juego, uno en cada banda, protagonizaron la respuesta al tanto de Toko Ekambi. La desventaja obligó a los de Asier Garitano a estirar líneas en la recta final, unos espacios que no terminaba de aprovechar el cuadro de Calleja a la contra. La tuvo Gerard Moreno, pero el delantero groguet no estuvo fino en la definición. El encuentro estaba abierto, tanto para la sentencia local como para el empate visitante. La escuadra alavesista arriesgó, es normal, a veces te puede salir bien y otras mal y a los vitorianos les salió cruz. Primero avisó Gerard Moreno, nuevamente, en un remate que terminó en gol pero que fue anulado justamente por fuera de juego. En la siguiente acción, a cinco minutos de la conclusión, no falló Gerard. Una jugada combinativa de los locales, en la que participaron Alberto Moreno en el inicio, Ekambi en la transición con el pecho y Cazorla con una magnífica asistencia que culminó a gol Gerard Moreno. En la recta final la grada amarilla brindó una cálida ovación a Ekambi en su marcha y su relevo, Javi Ontiveros, se encargó de cerrar la goleada en el lanzamiento de una falta.
El Submarino, actual máximo goleador de la liga con 24 goles, dormirá esta noche en puestos de Champions League, con este triunfo el cuadro de Javi Calleja se coloca tercero en la clasificación. La próxima cita del Villarreal será este mismo jueves, en jornada de liga intersemanal, la que los discípulos de Javi Calleja se desplazarán hasta Ipurua para enfrentarse al alavés a partir de las 19.00 horas.
