Un penalti y un error en una cesión en defensa marcaron la diferencia a favor del Castellón B ante la UDE hasta el minuto 90. Esa sería una breve descripción simplista de lo acontecido esta tarde en el Javier Marquina en uno de los partidos estrella de la temporada. Pero no fue exactamente así. Los albinegros superaron en todas las facetas a su rival, al que le pudieron golear, de hecho Montoliu marró un penalti, Marc Pitarch un par de manos a mano y el propio Montoliu también se encontró con la madera. Los visitante los intentaron, en especial en el segundo acto, pero de forma infructuosa. Para los que se quedan con los goles, Soriano inauguró el marcador de penalti a la media hora de juego, Marc Pitarch marcó antes del descanso y Aarón cerró la goleada en el descuento. Galería Fotográfica: Jorge Sastriques.
El Castellón B esperaba dar continuidad a su triunfo de la pasada semana ante el San Pedro, precisamente en el Javier Marquina, en su tercer envite consecutivo en el Grao, cabe recordar que la entidad azul le ofrece su campo tanto al filial como al juvenil orellut, de ahí una situación cuanto menos curiosa. En todo caso, el segundo equipo del Castellón buscaba asaltar de nuevo los puestos de promoción de ascenso a Tercera División ante un rival directo por ese objetivo, el Vall de Uxó. Los valleros se han afianzado en la zona noble desde el inicio del campeonato, pero lo cierto es que llegan después de dos pinchazos, tras encajar su primera derrota hace dos semana ante el Huracán, y después de no pasar del empate en el José Mangriñán frente a L’Alcora en la última jornada.
El conjunto de Dani García formó con un 4-4-2, con Veintimilla, Isierte, Íker Gómez y Aarón en línea defensiva; Salort y Temur en el doble pivote, Sergi Montoliu y Soriano en bandas; y Antonio Lewis y Sergi Montoliu en ataque. Poldi Sorribes optó por el mismo esquema táctico, con Pepe Segarra, Lalo, Cafú y Carlos Martín en defensa; Joel Sánchez y Joel Sánchez y Álvaro en el centro del campo, Mario Gallego y Mario Valcárcel en bandas; y Vargas y Marcos Pradas en ataque. El duelo de la máxima, como no podía ser de otro modo. Y es que los encuentro comenzó con un cierto equilibrio, eso sí, con un Castellón que se impuso en la posesión y fruto de ello protagonizó diversos acercamientos con mayo o menor capacidad de sorprender al portero Carles.
Sin embargo el primer gol del choque llegó desde los once metros, tras una falta sobre Antonio en el interior del área. Soriano se prestó a asumir la responsabilidad de transformar la pena máxima. Dicho y hecho. 1-0. Los valleros intentaron rehacerse del gol encajado contrarrestando la posesión del balón y atacando, en especial, en acciones a balón parado, pero ello no fue suficiente para inquietar al portero Charly Florencio. Con el paso de los minutos parecía que los de la Plana Baixa habían desactivado, en cierto modo, el juego local en campo contrario, pero nada más lejos de la realidad, los visitantes encajaron el segundo. Una mala cesión hacia atrás propició que Marc Pitarch se llevara el balón y marcara el segundo en un mano a mano ante Carles, frente al que definió con un tiro cruzado. Jarro de agua fría.
En la reanudación la situación no mejoró para una UDE que pudo encajar el tercer tanto en dos ocasiones, la primera de ellas de Sergi Montoliu, y la segundo en las botas de un Marc Pitarch que no supo aprovechar otra desconexión de la zaga visitante. Poldi Sorribes buscó la reacción de su equipo con la entrada de Héctor Zaragoza en ataque y Mario Milán en la medular. Con ellos los valldeuxenses crearon más peligro, pero quien
más se aproximó al gol fue de nuevo el filial albinegro. Los discípulos de Dani García tuvieron la opción de sentenciar el partido en un penalti cometido sobre Sergi Montoliu, pero el mismo delantero, que se encargó de lanzarlo, se encontró con la parada de Carles.
Los minutos pasaban y la UDE continuaba fuera del partido, los visitantes adelantaron líneas, no les quedaba otra alternativa, ese contexto propició que los albinegros tuvieran más espacios para poder crear peligro y, con ello, sentenciar definitivamente. El filial orellut realizaba una presión alta y provocó en más de una ocasión la pérdida del rival en zonas comprometidas. Era jugar a un cara o cruz. Marc Pitarch pudo marcar el tercero tras un gran pase filtrado por Temur, también tuvo la suya Íker Gómez con la testa. En cambio, la UDE, a excepción de algún acercamiento de Marcos Pradas y Vargas, apenas se prodigó de manera clara en ataque. En la recta final Montoliu también tuvo el tercer tanto en sus botas, con un chut cruzado a la salida del arquero Carles, pero el cuero, para suerte de los visitantes, golpeó en el poste con suspense. Fue un impass, porque el tercer gol local llegó en el descuento, obra de Aarón.
El equipo de Dani García suma su segunda victoria consecutiva con la que se sitúa en puestos de promoción de ascenso a Tercera División ante una UDE que ve comprometida su plaza de play-off, de hecho, si el Almazora vence en Alqueries este domingo los blanquiazules se verían fuera de la zona noble. En la próxima jornada el Castellón B se desplazará hasta el campo del Soneja, por su parte, los valleros recibirán al Cabanes en el José Mangriñán.