Después de quedar eliminados de la Copa del Rey tras caer en el Pizjuán por 3-1 ante el Sevilla FC, al Levante UD le tocaba pasar página. Los granota tenían que cambiar el chip al liguero y ponerse el mono de trabajo si querían sacar algo positivo de uno de los campos más difíciles de la competición como lo es el del CA Osasuna, El Sadar.

Como suele ser habitual en sus encuentros como local, CA Osasuna quiso comenzar el partido mandando en posesión y ocasiones. Roberto Torres tuvo la primera y, por suerte para los de la Comunitat, el balón dio en el larguero. Sin embargo, la siguiente más clara fue para el Levante UD por medio de las botas de Rochina que no definió bien. A partir de ahí, los granotas consiguieron meter el miedo en el cuerpo a los rojillos y el encuentro se mostró mucho más parejo y sin un dominador claro.

Es más, el paso de los minutos hacía que los de Paco López se sintieran cada vez más cómodos sobre el verde. Los zagueros levantinistas conseguían bloquear a la mayor amenaza ofensiva pamplonica reflejada en la figura del Chimy Ávila. Pero lo cierto es que los minutos pasaban y los porteros no tenían que intervenir hasta el momento, cosa que hizo que el resultado al descanso fuera el inicial de 0-0 con el que se dejó todo abierto para el segundo acto.

El inicio de los segundos 45 minutos fue una especie de calco al primero, con CA Osasuna intentando llevar la manija del encuentro y Levante UD defendiéndose bien y buscando las contras. Conforme se llegaba a la recta final del encuentro los rojillos metían una marcha más y los levantinistas querían dar con la tecla que les llevara a una victoria tras el tropiezo en casa ante el Alavés la pasada semana. La cuenta atrás para el silbido final del colegiado estaba cada vez más cerca, aunque todavía quedaba mucho por pasar ya que, en el minuto 80, iba a llegar la jugada polémica del encuentro.

El VAR iba a revisar una acción de Campaña para determinar que había penalti a favor de los navarros. Una pena máxima que el ex levantinista Rubén García no iba a perdonar para poner el 1-0 en el luminoso. Un duro golpe para el Levante UD que quedó muy tocado y eso fue aprovechado por CA Osasuna, ya que prácticamente acto seguido Iñigo Pérez iba a conseguir batir a Aitor para doblegar la ventaja y sentenciar el encuentro. A pesar de ello, los granotas buscaron la épica y Morales tuvo la ocasión para recortar distancias, pero Sergio Herrera detuvo sin problemas.

Con esta derrota, el Levante UD se queda en la décimo tercera posición con 26 puntos. Ahora, en la próxima jornada tendrán la complicada salida del Camp Nou para medirse al FC Barcelona.