Hubo derbi en Estambul en el día de ayer. El Galatasaray SK, tras seis años sin conseguirlo, asaltó el feudo de un Fenerbahce SK que no está pasando una campaña nada calmada ni en lo extradeportivo ni en el deportivo.
El Fenerbahce SK perdió en casa seis años después frente al Galatasaray SK
Tras el 1-3 y el pitido final del colegiado que significó el final del choque, se propició una de las acciones del fin de semana en el fútbol internacional y que refleja la situación del club turco a día de hoy. Y es que, el presidente del Fenerbahce, Ali Koç, decidió abandonar el palco y saltar hasta las gradas para pegarse con sus propio aficionados.
Y es que, los aficionados no están nada satisfechos con un equipo que se aleja de los puestos de cabeza en la competición liguera y mostraron su descontento ante su máximo mandatario. De esta forma, la respuesta del presidente no fue otra que la meterse en la grada y enfrentarse cara a cara con sus propios hinchas.
Las fuerzas de seguridad evitaron algo peor
Todo esto generó una enorme pelea a los ojos de todo el mundo y con las cámaras grabándolo todo. Es más, quién sabe que hubiese pasado si las fuerzas de seguridad que habían en el estadio no hubiesen intervenido. Una muestra más de acción violenta que se vive en el fútbol turco y que ha dado la vuelta a todo el mundo.
