Hace 11 años el Levante UD iniciaba una pretemporada con tan pocos jugadores en la plantilla que no podían jugar “partidos” entre ellos, hacían más bien rondos, sobre el césped de Oliva. La entidad con enormes deudas a sus espaldas inició un proyecto low cost con un joven Luis Garcia Plaza como entrenador, donde el objetivo era salvar la temporada en Segunda. La prioridad del club era encontrar la fórmula para salir de un concurso de acreedores y encontrar un camino hacia la viabilidad.
Aquel Levante UD se formó con jugadores descartados por otros clubes, futbolistas que querían reivindicarse y demostrar que tras sufrir lesiones importantes merecían un sitio en la élite. Llegaron al Ciutat de Valencia un grupo humano que formó una familia, y de ahí el éxito obtenido en la temporada 2009/10: el ascenso a Primera inesperado pero muy necesario para la viabilidad del club.
Pallardó, Rubén Suárez, Javi Guerra y Héctor Rodas nos recuerdan como vivieron aquel inolvidable partido en el Cartagonova
“Muchos daban el club por muerto”, nos dice Miguel Pallardó, componente de aquel Levante UD donde su situación económica era lo que centraba su día a día. En lo deportivo, el 19 de diciembre de 2019 los granotas ocupaban la posición decimotercera en la tabla de Segunda, y sumaban tres puntos más que los equipos del descenso. El rival era el FC Cartagena de JIM, Juan Ignacio Martínez, que era tercero con un proyecto de jugadores veteranos en la categoría para intentar el ascenso. Aquel encuentro el Levante UD lo perdió 1-2. El deseo que muchos pidieron en Navidad era que la plantilla sumase cuantos antes los puntos de la permanencia.
Pero aquella temporada les tenía preparados un gran final. El partido decisivo iba a ser frente al FC Cartagena, pero como visitantes, en la segunda vuelta, en el Cartagonova. El 22 de mayo de 2019 el club granota no celebró un ascenso, pero aquella tarde el levantinismo sintió que iba a ascender. Recordamos con cuatro jugadores de aquel equipo una tarde inolvidable para los levantinistas: Pallardó, Héctor Rodas, Rubén Suárez y Javi Guerra.
Jornada 38. Cinco partidos para el final de la liga. La Real Sociedad es primera con 65 puntos, el Levante es segundo con 62. El FC Cartagena tercero con 61. Entonces los tres primeros subían directos, sin play-off. Y les seguían el Hércules CF con 60 puntos, Real Betis con 58 y Villarreal B y Elche CF con 57. La afición granota se movilizaba para llenar autobuses con un destino y un objetivo: Cartagena y sellar ese ascenso increíble (tras una gran segunda vuelta del equipo).
Mucho calor, un ambientazo en las gradas, con cientos de aficionados granotas tras una de las porterías. La alineación de aquel partido inolvidable fue: Manolo Reina, Pau Cendrós, Robusté, Ballesteros, Juanfran, Iborra, Juanlu, Miguel Pérez, Pallardó, Rubén Suárez, Javi Guerra. Comenzó golpeando Robusté, pero Mariano y Ander habían remontado a la media hora de juego. Con la derrota por 2-1 el equipo de Luis García Plaza se marchó al vestuario.
Nada más comenzar la segunda parte Txiki fue expulsado tras ver una doble amarilla, el Levante UD tenía ante sí su gran oportunidad de eliminar a un rival por el ascenso. Y lo aprovechó. A los diez minutos Rubén Suárez y Robusté remontaron, 2-3. En un ambiente muy caliente, con la grada cartagenera muy encendida porque veía que sus opciones de ascenso se le escapaban, apareció Javi Guerra para marcar dos goles y sentenciar: 2-5. Luego un gol de Etxeita puso el 3-5, y llegó la expulsión de Juanfran, aunque el Levante siguió jugando con once, diez más uno: la afición que no paraba de animar con sus cánticos.
Pallardó: “Amigos míos fueron allí en autobús y me dijeron que como ese partido no habían vivido nada igual, como ese nunca»
El mediocentro de Alaquàs jugó 35 partidos aquella temporada en la liga, y fue titular en aquel inolvidable encuentro en el Cartagonova. Así recuerda aquellos 90 minutos: “El partido de Cartagena fue clave en el ascenso, toda la gente se movilizó, amigos míos fueron allí en autobús y me dijeron que como ese partido no habían vivido nada igual, como ese nunca”. Y añade: ·Fue algo muy bonito, empezamos por delante, nos remontan, remontamos nosotros y toda la gente que había del Levante allí celebrando con nosotros al final la victoria, a partir de ahí el equipo fue para arriba y de ese partido al ascenso”.
Así recuerda el exjugador granota aquella mágica temporada: “Aquel fue uno de los mejores años que he vivido de convivencia de grupo, ese año inolvidable conseguimos algo que nadie se lo esperaba, muchos daban el club por muerto porque había muchas deudas y lo que se consiguió es para estar orgullosos”.
Héctor Rodas: «Años después el Levante UD llegó a jugar en Europa pero ese año del ascenso a Primera es el que cambia la historia del Levante»
El defensor valenciano, ahora en la Cultural Leonesa, jugó 22 partidos de liga ese curso donde comenzó a ser protagonista en el primer equipo. Recuerda que aquel encuentro “fue muy complicado, recuerdo que estaba de los nervios, recuerdo la felicidad de cuando volvíamos en autobús a Valencia”. El rival era uno de los mejores de la Segunda entonces para Rodas: “El Cartagena de aquel año, entrenado por JIM, tenia jugadores de gran nivel como Víctor, Toché… míticos futbolistas”.
Y recuerda así aquel año: “para mí fue brutal, me cambió la vida, pasé de renovar dos años con el club a renovar cinco tras un una temporada espectacular”. “El equipo notaba que la gente empezaba a creerse que podíamos ascender a Primera División cuando el equipo no estaba hecho para ello a nivel de presupuesto, y hay que recordar que dos o tres mil personas ocupaban las gradas del Ciutat a inicios de aquella temporada, sabíamos que aquel partido iba a ser una batalla decisiva, el Cartagena se jugaba lo mismo».
Así destaca la importancia de aquel ascenso el jugador valenciano formado en el club: «Años después el Levante UD llegó a jugar en Europa pero ese año del ascenso a Primera es el que cambia la historia del Levante, era el año del centenario y todo cambió después de momentos muy complicados». Y añade: «Como el Ave Fénix se resurgió de una situación crítica y el club ha vivido los mejores años».
Rubén Suárez: «el Presidente, Quico Catalán, nos agradeció el esfuerzo y nos dijo que de no haberlo conseguido la situación del Levante UD habrIá sido muy crítica»
Uno de los futbolistas que destacaban por su enorme calidad, Rubén Suárez, que sigue jugando ahora en el CD Soneja de la Preferente, recuerda sobre aquel partido en el Cartagonova que tuvieron: «un fondo lleno de aficionados nuestros para apoyarnos en este partido tan importante, ese encuentro no iba a decidir el acenso pero fuimos con el convencimiento que ganar allí podía ser un refuerzo definitivo para lograr subir de categoría». Y añade: «La tensión se notaba las horas antes del partido, sabíamos que ese partido iba a tener una gran repercusión, y solo queríamos devolver a la gente todo el esfuerzo de haberse pegado ese viaje en autobús para vernos».
Para Rubén el éxito de aquel ascenso se empezó a construir la campaña anterior: «Esa temporada poco antes de cerrarse el mercado vinieron muchos jugadores, el club estaba en una ley concursal y muchos de los que fichamos ese verano veníamos bajo una circuntancias similares: de llegar de clubes donde no habíamos contado con muchas oportunidades o de lesiones y queríamos volver a demostrar que podíamos seguir jugando a ese nivel». En su caso: «Al final cuando un jugador tiene esas ganas de demostrar que es válido saca todo el orgullo, en mi caso yo tenía ganas de demostrar después de la lesión en el Elche CF que estaba totalmente recuperado».
Y recuerda las complicaciones que se encontró nada más aterrizar en el Levante UD: «Ese primer año en el club en pretemporada nos duchábamos en vestuarios distintos porque se había roto la caldera, luego otro viaje a Zaragoza en autobús creo donde este se rompió y tuvimos que volver y hacer otra vez el viaje». Rubén destaca «la familia» que se creó: «Aquel vestuario era increíble, era un grupo de amigos que la siguiente temporada se fue consolidando con la llegada de jugadores como Juanfran y Ballesteros, gente de una gran calidad humana y que nos dieron es plus para lograr el ascenso».
Así valora la plantilla de aquel equipo: «Allí habían jugadores que tenían muy buenas condiciones como Cerra, Juanlu, Xisco Muñoz… futbolistas que en esa temporada ofrecieron un rendimiento increíble y con un míster que tuvo mucha culpa de ello por su manera de trabajar, cada uno estaba convencido de lo que hacía».
«El club vivió en aquel año una situación límite» resalta Rubén, que recuerda un detalle que indica lo importante de aquel ascenso: «Recuerdo que cuando acabó la temporada e íbamos al despacho uno por uno del Presidente, Quico Catalán, donde nos iban a decir si continuábamos o no, él nos agradeció el esfuerzo y nos dijo que de no haberlo conseguido la situación del Levante UD habrá sido muy crítica». «Me siento orgulloso de haber formado par de aquel grupo que lo consiguió, que logró ese ascenso tan necesario par el club», afirma el talento asturiano.
Javi Guerra: «Fue un partido loco con polémica, y al final vinieron mis dos goles que ya si que nos puso el partido encarrilado»
El delantero autor de los últimos dos goles de aquel partido, los que sentenciaron esa victoria fundamental por el ascenso, fue Javi Guerra. Él recuerda ese partido y esa temporada así: «Era un año donde todos nos jugábamos mucho y cada partido era a vida o muerte, éramos rivales directos en aquel momento Cartagena y Levante, y recuerdo que fue un partido de un ambiente increíble y un calor impresionante». Y añade: «La verdad que para nosotros fue un partido perfecto, hicimos prácticamente todo bien, y además cada vez que llegábamos a su portería le hacíamos daño». «Fue un partido loco con polémica, y al final vinieron mis dos goles que ya si que nos puso el partido encarrilado».
¿Qué supuso aquel ascenso para él? «Bueno imagínate, fue el primer ascenso en mi carrera como profesional además viviéndolo en Valencia con mi familia que son de allí». Además guarda una gran anécdota del partido donde matemáticamente se logró el ascenso: «Fue contra el Castellón, que en aquel momento era el equipo de mi hermano gemelo y que además lo estaba viendo en la grada». Y destaca: «Ese fue el año del centenario además, así que yo creo que estaba predestinado y tuvimos la suerte de poder vivirlo con un equipo que a pesar de, como dices no estaba pasando su mejor momento, como club los jugadores si que dimos todo para conseguir algo tan bonito y difícil cómo es un ascenso a Primera».
Tras el pitido del árbitro los jugadores fueron a festejar esta gran victoria con los suyos, a ese fondo que desbordaba ilusión y alegría. Luis García Plaza intentaba frenar la euforia en la rueda de prensa, pero los cánticos de fondo que se escuchaban de sus jugadores en aquel vestuario del Cartagonova los delataban. Aquella plantilla ya se veía capaz de lograr lo imposible.
Luego llegó la victoria ante el Rayo Vallecano que dejaba al Levante UD al borde del ascenso. El Stadium Gal de Irún, a pocos kilómetros de Francia, podía ser el escenario para certificar esta gran hazaña, pero no, los locales vencieron. La gran fiesta llegaría una semana después en casa, y ante el CD Castellón. En siete minutos Juanlu y Xisco Muñoz adelantaron al Levante, 2-0, más un tercer tanto de Javi Guerra antes del descanso sentenciaba el partido. Al final 3-1 y explosión de alegría. El Levante UD lograba quizás el ascenso más necesario de su historia, el que le ha permitido ser ahora un club puntero del fútbol. ¡Qué tarde aquella de hace ahora 10 años en el Cartagonova!
Vídeo de «rOter» que recupera aquellos inolvidables goles:
