El Ejea continúa reforzándose de cara a su segunda temporada consecutiva en la categoría de bronce del fútbol español. En este caso se ha hecho con los servicios de Santi Correa (Montevideo, Uruguay, 2001) para apuntalar su parcela ofensiva. Así, el conjunto ejeano se hace con una de las promesas de las inferiores de Danubio D.C., una de las canteras más potentes del país charrúa.
Santi Correa se formó en la cantera de Danubio, conjunto de su país. Allí estuvo hasta finales de 2019, cuando tomó la decisión de viajar al otro lado del charco. Llegó entonces al SC Praiense, que juega en la II División portuguesa. Tras no tener minutos en el conjunto luso llegó a Extremadura con el ánimo de ayudar al conjunto de Almendralejo. En tierras extremeñas tampoco dispuso de minutos.
Reúne las características del juagdor uruguayo: hábil, veloz y enérgico
Santi Correa es el típico atacante sudamericano. La brega caracteriza a este tipo de futbolistas. Además, según lo presenta el propio club, «se trata de un jugador ágil, habilidoso y con mucha velocidad de ejecución«. Así, el futbolista puede ayudar a la SD Ejea otorgándole descaro y rapidez a su ataque, característica que le faltaba al conjunto de las Cinco Villas. «Tiene gran capacidad para atacar los espacios y para desmarcarse«, culmina el club aragonés.
Otra de las virtudes que caracterizan a Santi Correa es su gran golpeo del balón parado. Pese a que el club ejeano ya cuenta con especialistas, ahora suma un activo más para uno de los factores más importantes en Segunda B. Correa puede jugar tanto de extremo como de segundo punta, llegando incluso en ocasión a partir desde la posición de interior. En suma, el jugador reúne «eficacia y compromiso, alma y entrega«