Copa del Rey (2ª eliminatoria).- CD Castellón, 0; CD Tenerife, 2.
Adiós a la Copa del Rey. La unidad B del Castellón claudicó en un encuentro en el que todo lo que pudo salir mal salió mal. Los albinegros recibieron el primer gol a los cuatro minutos, en un error defensivo que aprovechó Vada, encajaron el segundo al borde del descanso con una golazo de Carlos Ruiz previa pérdida de balón en la frontal del área. Con todo en contra, a pesar de haber gozado de algunas ocasiones de gol, en especial en las botas Juanto, el equipo de Óscar Cano no supo encontrar el camino del gol ni de penalti, pues en el último cuarto de hora del envite Víctor García marró una pena máxima, la última acción para la esperanza. Toca pensar solo en la Liga.
El conjunto albinegro, como era previsible registró una auténtica revolución en su once inicial, Óscar Cano optó por los jugadores menos habituales en liga para afrontar la segunda ronda de la Copa del Rey, tal y como hizo ante el San Fernando. De este modo, ningún jugador repitió respecto a once del pasado domingo. Los orelluts salieron con un 1-4-2-3-1, con Whalley en portería; Muguruza y Víctor García en los laterales, y Lapeña y Delgado en el eje de la zaga; Gus Ledes y Marc Castells en el doble pivote, Paolo Fernandes y César Díaz en bandas; con Carrillo en la mediapunta y Juanto Ortuño en ataque. No comenzó nada bien el encuentro para el equipo de Óscar Cano, pues cuando apenas se llevaban transcurridos cuatro minutos se encontró con el jarro de agua fría del gol del Tenerife. Una mala cesión del zaguero Delgado propició una recuperación visitantes en tres cuartos de campo que culminó Vada con un tizo cruzado ante Whalley. Le tocaba remar contracorriente al equipo de la capital de la Plana.
El gol encajado trastocó los planes de un Castellon que cambió sus sistema, pasó a jugar con un 5-2-3, con defensa de tres, formada por Lapeña, Castells y Delgado, actuando Muguruza y Víctor García de carrileros; Carrillo y Gus Ledes en el doble pivote, y César Díaz y Paolo Fernandes por dentro, por detrás de Juanto. A pesar de ello, el cuadro chicharrero se mostró más asentado sobre el terreno de juego en los primeros minutos y llegó a la meta de Whalley con demasiada facilidad. Con el paso de los minutos el Castellón comenzó a protagonizar aproximaciones al arco rival, sendas acciones de Paolo Fernandes y de Juanto, previa jugada personal, fueron un claro ejemplo de ello. Pero más clara fue la que tuvo el ariete Joselu, que tras un peligroso pase atrás de Paolo, conectó con la testa un balón en el corazón del área obligando a intervenir al arquero albinegro. El Castellón puso la réplica con un gran disparo de Carrillo que hizo volar a Ortolà para salvar el gol del empate. El partido no tenía un claro dominador sobre el rectángulo de juego, si los locales intentaban mantener la posesión del balón y, a través de ella, trenzar ocasiones de gol, el cuadro chicharrero esperaba atrás, o también los errores albinegros, para recuperar y montar rápidas transiciones con las que hacer daño.
Así, los blanquiazules se estiraban aprovechando los errores en la salida o circulación del balón, mientras que Juanto tuvo una clara oportunidad para empatar con un remate a bocajarro que sacó Ortolà. En la recta final del primer acto fue cuando más confortable se sintió el equipo de Óscar Cano, Muguruza puso un peligroso centro al que no llegó Juanto por poco, precisamente el de Yecla tuvo otra en un disparo con pierna derecha. Le estaba costando encontrar el camino del empate a un Castellón que volvió a recibir una pésima noticia en el minuto 36, cuando César Díaz se tuvo que retirar al sentir una molestias, precaución ante todo, Cano le relevó por Rubén Díez sin cambiar el sistema táctico. Pero para mala noticia la que iba a llegar al filo del descanso, una desafortunada pérdida de Muguruza en el interior del área la recuperaron los tinerfeños para resolver con un disparo de Carlos Ruiz desde el vértice del área. Palo en el descuento.
La segunda mitad comenzó con los mismos futbolistas que terminó la primera y con un Castellón más intenso. Rubén Díez remató un centro desde la banda derecha en los primeros compases de la reanudación, era una declaración de intenciones. Pero las intenciones hay que transformarlas en logros y el cuadro albinegro debía ir a por ello nte un rival que ya tenía la faena hecha y el crono a favor. Con todo, los albinegros lo intentaban, Paolo Fernandes, en un disparo muy escorado probó fortuna, pero Ortolà atrapó el balón con facilidad. La decoración era compleja para los locales cuando llegó el susto del partido, un golpe en el rostro dejó conmocionado al futbolista del Tenerife Nono, que se tuvo que marchar del partido. El partido estaba al todo o nada, o lo que es lo mismo, a marcar un gol para meterse en el partido o encajar el de la sentencia. Cerca estuvo de suceder los segundo pasado el primer cuarto de hora del segundo acto, en un mano a mano de Vada del que salió vencedor el meta Whalley.
Había que buscar un revulsivo, un cambio. Y Óscar Cano dio entrada al delantero Jordi Sánchez para retirar a un defensa como Delgado, el esquema orellut volvía al 4-4-2, con Castells y Lapeña en el eje de la zaga, y Muguruza y Víctor García en los laterales, y dos hombres en ataque, pues a Juanto se le sumaba ahora el ariete catalán, quedando Carrillo y Paolo en bandas con Rubén Díez y Gus Ledes por dentro. Con los cambios el Castellón ganó en presencia en ataque pero no en claridad en los últimos metros, puesto el metas Ortolà ni tenía que intervenir, de hecho la acción más clara la protagonizó Muguruza con una volea que se marchó a la grada.
La reacción local, ya a toque de corneta, fue la doble sustitución de Jorge Fernández y el debutante Alejandro Marcos, por Carrillo y Lapeña respectivamente. El crono corría cada vez más rápido para un Castellón que primero debía anotar el gol que le metiera en el partido, y lo tuvo muy cerca. Un claro penalti sobre Víctor García, a 13 minutos de la conclusión del choque pudo dar opciones. Pero no fue así. En una noche aciaga, qué no puede salir mal. El propio Víctor García asumió la responsabilidad de lanzar la pena máxima, una pena máxima que logró atrapar el cancerbero Ortolà. Se esfumaban las opciones de forzar la prórroga.
No habrá más Copa del Rey en Castalia, los albinegros vuelven a caer en la segunda ronda del torneo por tercera temporada consecutiva, hace dos años fue el Calahorra, el curso pasado Las Palmas y, este año, otro conjunto canario rompe las ilusiones de recibir a un equipo de Primera División en el estadio de la Avenida Benicàssim. Toca centrar todos los esfuerzos en conseguir el objetivo más perseguido y principal del curso, la permanencia en el fútbol profesional. La próxima cita del Castellón será en Liga, concretamente este domingo (21.00 horas), cuando los discípulos de Óscar Cano se medirán al Espanyol a domicilio, con la intención de dar la sorpresa en el feudo de uno de los cocos de la categoría.
Ficha técnica:
CD Castellón: Óscar Whalley, Muguruza, Lapeña (Alejandro Marcos, m. 75), Delgado (Jordi Sánchez, m. 67), Víctor García, Marc Castells, Gus Ledes, Paolo Fernandes, Carrillo (Jorge Fernández, m. 75), César Díaz (Rubén Díez, m. 41) y Juanto Ortuño.
CD Tenerife: Ortolà, Kakabadze, Alberto, Carlos Ruiz (Jorge, m. 76), Pomares, Vada, Javi Alonso (Sipcic, m. 60), Suso (Álex Muñoz, m. 76), Zarfino (Aitor Sanz, m. 60), Nono (Bermejo, m. 57) y Joselu.
Goles: 0-1. Min. 4: Vada. 0-2. Min. 46: Carlos Ruiz.
Árbitro: Alejandro Muñiz Ruiz (Colegio Gallego). Amonestó al jugador del Castellón Juanto (40’); así como los futbolistas del Tenerife Vada (32’), Aitor Sanz (78’), Alberto (84’) y Bermejo (84’).
Estadio: Castalia (150 espectadores).
Incidencias: Castalia volvió a registrar público desde el pasado 8 de marzo del 2020, eso sí, con el acceso restringido a 150 abonados albinegros. Noche gélida, 6ºC, sensación térmica de 4ºC.