UEFA Champions League (Octavos, ida).- Villarreal CF, 1; Juventus, 1.
La eliminatoria se iba a decidir en Turín, tal y como señalaron ambos técnicos en la previa, y así será. La Juventus dejó en estado de shock a La Cerámica a los 32 segundos, tiempo que le bastó a Vlahovic para abrir fuego y poner por delante a la escuadra transalsalpina. Pero si la ‘Vecchia Signora’ es un gigante del fútbol mundial el Villarreal es una realidad entre los grandes, que se lo digan al Manchester United o al Chelsea. Los amarillos se crecen en las grandes citas, especialmente en Europa, y esta noche no fue diferente, pues la remontada pudo llegar antes del descanso, con un balón al palo de Lo Celso incluido. Los italianos atacaban con peligro con balones largos pero los groguets resistieron en defensa y penalizaron una mala maniobra defensiva visitante con un golazo de Parejo previa asistencia de Capoue.
El Submarino volvía a navegar por aguas continentales a la altura de los octavos de final de la Champions League, trece años después de aquella eliminatoria en la que el Arsenal, verdugo de las semifinales del 2006, le dejó en la cuneta justo antes de la antesala de la gran final. Desde entonces la entidad vila-realense volvió a quedarse a las puertas de un par de finales de la Europa League (2011 y 2016) pero saboreó las mieles del éxito con una noche para la leyenda en Gdansk, donde se coronó campeón de la segunda competición europea el año pasado. Con esa etiqueta regresó a la élite del viejo continente, donde dejó fuera al Atalanta y se clasificó para los octavos por detrás del Manchester United.
Para la histórica ocasión, con un ambiente cargado de emoción, tanto en las calles de Vila-real como en el interior del estadio, Unai Emery presentó lo más parecido a su once de gala, con el regreso a la titularidad, en relación al ultimo envite en Granada, de Rulli, Foyth, Albiol, Pedraza, Capoue, Alberto Moreno y Chukwueze, pero sin Gerard Moreno, baja consabida por lesión. Con todo, los amarillos formaron con un 1-4-2-3-1, con Rulli en portería; Foyth en el lateral derecho, Pedraza en el izquierdo, y Albiol y Pau Torres en el eje de la zaga. Capoue llegó justo para el partido para completar el doble pivote con Parejo, por detrás de Lo Celso, y con Chukwueze y Alberto Moreno en bandas, en una línea de tres justo por detrás de Danjuma. Por su parte, los italianos llegaron mermados por las bajas, con las ausencias de Chiellini, Rugani, Bernardeschi, Chiesa y, la más destacada, la de su estrella Dybala. Allegri presentó un once en el que destacó la novedad de De Sciglio en una defensa de cinco, con Danilo, De Ligt y Alex Sandro por dentro y Cuadrado y De Sciglio actuando de laterales. Arriba Vlahovic era la principal amenaza, acompañado por el español Morata.
Vila-real era una fiesta pero la Juventus es un grande, ante los grandes no se puede cometer ni el más mínimo error, máxime en estas instancias, y golpeó en la primera que tuvo, y la tuvo a los 30 segundos de juego, en un robo de Danilo desde campo propio, el brasileño envió el cuero arriba y Vlahovic se anticipó a Pau y a Albiol, controló el cuero con el pecho y a la media vuelta batió por abajo al meta Rulli con un disparo con la pierna derecha. Jarro de agua fría en La Cerámica, por suerte desde esta temporada los goles fuera de casa no valen doble. Los italianos dejaron patente desde el pitido inicial su estrategia para llevarse el partido, abusar del balón en largo para cazar con la rapidez de Cuadrado o Vlahovic a la zaga grogueta.
Pero el Submarino compite, siempre compite ante los más grandes, e intentó levantarse, como lo sabe hacer, controlando el partido a través de la posesión. Y en el 12’ los groguets tuvieron una oportunidad clara para volver a equilibrar el electrónico, con un error de Danilo que aprovechó Pedraza para trazar la diagonal dentro del área y ceder el cuero a Lo Celso, pero el argentino envió el cuero al poste. Y no se quedó ahí el cuadro de Unai Emery, que persistió para igualar la eliminatoria, la tuvieron también los locales en un remate de espuela de Danjuma, tras un centro de un incisivo Chukwueze desde la banda derecha. La tercera intentona la protagonizó Foyth con un disparo cruzado desde la frontal del área que no encontró portería.
No obstante, el Villarreal debía andar con cuidado en defensa, puesto que la Juve atacaba con rapidez cuando lo hacía. Locatelli probó fortuna desde lejos y también lo hizo Morata, pero su remate se fue alto. Tres cuartos de lo mismo sucedió con el tiro de Capoue, que sirvió de réplica pero infructuosa. El Submarino tenía el balón, 60% tras la primera media hora de juego, pero los transalpinos se sentían cómodos así, dejando el balón a su oponente para buscarle las cosquillas a través de rápidas transiciones con las que ponerle en jaque, y les estaba saliendo bien el planteamiento. Con a escueta ventaja visitante se llegó a un tiempo de descanso en el que campeaba en el marcador la tempranera diana de la sensación serbia de la Juventus.
Tras el descanso entró Bonucci al terreno de juego, más oficio para defender el marcador. Los juventinos pudieron dar otro susto en la reanudación con un tiro de Morata que no encontró portería. Al Villarreal le costaba generar peligro, en una acción combinativa Alberto Moreno no pudo conectar con acierto un buen centro de Pedraza. Pero cuando menos peligro estaba creando el Submarino llegó el gol del empate, el gol que mantenía las esperanzas e ilusiones amarillas intactas. Un enorme balón al área de Capoue, que parecía entrañar poco peligro, lo conectó de primeras Parejo libre de marca, en un desajuste defensivo de los italianos, para sorprender al meta Szczesny. La Cerámica explotaba de júbilo, no era para menos.
Y tras el empate el conjunto de Allegri debió quedarse con diez jugadores, pues una entrada a destiempo de Rabiot sobre Chukwueze bien lo mereció, pero el árbitro germano ‘rebajo la sanción a una cartulina amarilla. Es evidente que la eliminatoria adquiría una nueva decoración tras el gol, aunque sobre el terreno de juego se pasó a una fase de menos presencia en las áreas y más juego en el centro del campo. A falta de un cuarto de hora para la conclusión del encuentro Emery realizó sus dos primeras permutas, con las que cambió íntegramente la banda izquierda, dando entrada a Estupiñán en el lateral y a Manu Trigueros por delante, quitando a Pedraza y a Alberto Moreno.
Pero pese a que el balón rodaba poco por las áreas el Submarino no podía perder la concentración defensiva, menos en los últimos instantes del envite, pues en el 84’ Morata combinó con Vlahovic y este se zafó de su marca y disparó a puerta con peligro, Rulli respondió atrapando el esférico en dos tiempos. Si dura fue la entrada de Rabiot no lo fue menos la de Estupiñán sobre Mckennie, que obligó al estadounidense a retirarse antes de tiempo, por él entró Zakaria. En las postrimerías del duelo si apretó un equipo ese no fue otro que el Villarreal, que buscaba darle la vuelta al marcador, pero a los groguets les faltaba encontrar ese último pase. En el descuento Emery volvió a mover ficha por partida doble y metió a Boulaye Dia y Yeremy Pino por Danjuma y Chukwueze pero la Juve intentó que se jugará lo mínimo posible y lo que se jugara que no tuviera trascendencia en el área.
Ahora toca centrarse en el campeonato doméstico, la próxima cita del equipo de Unai Emery será este mismo domingo (14.00 horas) ante el Espanyol, frente al que tratará de encadenar la segunda victoria consecutiva en liga después de vencer en Granada, con el fin de meter presión y seguir vivo en la lucha por clasificarse para la próxima edición de la Champions League. La máxima competición continental no regresará hasta el miércoles 16 de marzo (21.00 horas), cuando tendrá lugar el duelo de vuelta en el Juventus Stadium, donde se decidirá una eliminatoria que ahora se mantiene con las espadas en todo lo alto.
Ficha técnica:
Villarreal CF: Rulli, Foyth, Albiol, Pau Torres, Pedraza (Estupiñán, min. 78), Capoue, Parejo, Chukwueze (Yeremy Pino, min. 90), Lo Celso, Alberto Moreno (Manu Trigueros, min. 78) y Danjuma (Boulaye Dia, min. 90).
Juventus: Szczesny, De Sciglio (Pellegrini, min. 87), Danilo, De Ligt, Alex Sandro (Bonucci, min. 46), Mckennie (Zakaria, min. 81), Locatelli (Arthur, min. 71), Rabiot, Cuadrado, Morata y Vlahovic.
Goles: 0-1. Min. 1: Vlahovic. 1-1. Min. 66: Parejo.
Árbitro: Daniel Siebert (Alemania). Amonestó al jugador del Villarreal Rulli (71’); así como al futbolista de la Juventus Rabiot (71’),
Estadio: Estadio de la Cerámica (Vila-real). Entrada, 17.686 espectadores, 2.000 aficionados de la Juventus.
Incidencias: Partido de la ida de los octavos de final de la UEFA Champions League y primer encuentro entre Villarreal CF y Juventus en competición oficial. Aforo limitado al 85% a causa de las restricciones sanitarias contra la pandemia del Covid-19. 14ºC de temperatura.