En Vigo hay futbolistas de muchos quilates. El último ejemplo ha sido Gabri Veiga, canterano del RC Celta, que se marchó a Arabia, pero antes dejó un grandísimo sabor de boca en la liga nacional. Además, uno de los grandes nombres de nuestra liga también es vigués: Iago Aspas. Estos dos ejemplos demuestran que el fútbol gallego está muy vivo.
del once inicial que sacó Claudio Giráldez diez jugadores eran gallegos y ocho habían pertenecido a la cantera viguesa
En Balaídos suspiran por volver a sacar futbolistas de este perfil y la realidad es que lo están haciendo. Su filial es ahora mismo segundo en el Grupo I de Primera Federación y ante el Teruel se dio una circunstancia espectacular: del once inicial que sacó Claudio Giráldez diez jugadores eran gallegos y ocho habían pertenecido a la cantera viguesa.
Con estos chicos el RC Celta Fortuna pasó por encima de un voluntarioso Teruel, que sigue viendo como se le está haciendo enorme la categoría. Los visitantes dominaron todas las facetas del juego, pero especialmente la posesión y, de hecho, los dos goles que materializaron vienen dados por dos jugadas colectivas trenzadas a la perfección.
El primer tanto fue en propia meta, pero la realidad es que el centro raso era tan bueno que Sanchís no tuvo otra que intentar despejar, con la mala fortuna de que el balón acabó en el fondo de la red. Mientras que el segundo gol fue obra de Miguel Román tras batir al meta desde fuera del área en un disparo sin oposición. Tras este segundo tanto ya no sucedió nada más, el partido estaba visto para sentencia.
De esta manera, el filial vigués continúa demostrando que la cantera funciona. Viendo la situación actual del primer equipo, no sería de extrañar que en un momento dado de la temporada Rafa Benítez tirase de los chavales, pues la verdad es que hay algunos que están tirando abajo la puerta de Primera División. Mientras tanto, los chicos disfrutan en los campos de Primera RFEF.