La Copa del Rey destaca por ser una de las competiciones más democráticas de nuestro país. Cuando los enfrentamientos son a cara o cruz siempre hay más posibilidades de que haya sorpresas, y como aficionados al fútbol, hemos de admitir que cuando no juega nuestro equipo solemos ir con el conjunto más débil, es algo instintivo en la raza humana.
De los ocho clubes participantes tan solo dos tienen a sus primeros equipos en Primera División: el Betis y el Mallorca
Pues bien, en esta Copa del Rey Juvenil las sorpresas se han dado y elevadas al máximo exponente. De los ocho clubes participantes tan solo dos tienen a sus primeros equipos en Primera División: el Betis y el Mallorca. El resto de escuelas han demostrado a toda España que el talento de sus fábricas es innato a pesar de que no jueguen en la categoría reina.
Una de ellas es la del Levante. El conjunto granota ha llegado a estos cuartos de final de la Copa del Rey Juvenil después de apear sin piedad al Atlético de Madrid por 3 a 0. La Ciudad Deportiva de Buñol fue testigo de un encuentro absolutamente espectacular de los valencianos, que no dejaron que los colchoneros se metiesen en el partido en ningún momento.
Ahora, se preparan para una nueva cita con la historia. Mañana, a las 15:45 h, el Levante viajará a Oviedo para clasificar entre los cuatro mejores equipos juveniles del país. Ciertamente, el sorteo ha sido benévolo, pero cabe recordar que los ovetenses superaron al Cádiz en tierras andaluzas con una facilidad inusitada, por lo que son un auténtico equipazo.
Gane quien gane mañana se llevará un premio tremendo. Las dos escuelas están haciendo un trabajo maravilloso y son dos equipos que este año sueñan con volver a Primera División. Si no lo consiguen en un futuro cercano que no se preocupen, porque con el inmenso talento que les viene por detrás volver a la élite será cuestión de tiempo.
