Vuelve la competición a Tercera Federación tras el parón por la Copa de las Regiones. Este domingo a las 12:00 en el Ramón Asensi Juan, Jove Español y UD Alzira se enfrentarán en un choque decisivo para escapar de la zona baja. Ambos equipos llegan empatados a diez puntos, inmersos en rachas delicadas y con la urgencia de sumar para no caer a posiciones de mayor peligro en una clasificación extremadamente comprimida.
Dos equipos heridos, un mismo objetivo
El Jove Español encara el encuentro con la energía renovada que ha supuesto la vuelta de Jaime Pérez al banquillo. Desde su regreso, el conjunto sanvicentero ha mostrado una mejora evidente en solidez y compromiso, logrando un triunfo vital en el campo del Roda y compitiendo con buen nivel frente a uno de los grandes aspirantes del grupo como el Atlético Saguntino. El equipo continúa teniendo problemas para cerrar partidos y para encontrar regularidad ofensiva, pero la sensación es otra respecto a las últimas semanas de la etapa previa.
La UD Alzira llega en un momento más complejo todavía. Los azulgranas encadenan cinco jornadas sin ganar y la derrota en casa frente al Roda dejó un regusto especialmente amargo, tanto por el rival directo como por la imagen ofrecida en un duelo que podía haber supuesto un pequeño desahogo. Los empates ante Torrellano y Recambios Colón demostraron capacidad de reacción, pero también expusieron una fragilidad defensiva que sigue penalizando. Desde la llegada de Ramón Llopis, el equipo mostró un primer impulso competitivo, aunque los resultados posteriores han devuelto al Alzira a posiciones de incertidumbre.
Un duelo entre dos de las defensas más castigadas
El partido subraya la situación complicada en la que se encuentran ambos conjuntos. El Alzira y el Roda son los dos equipos más goleados del grupo con veinte tantos encajados, mientras que el Jove Español queda inmediatamente por detrás con diecinueve. Esa fragilidad defensiva ha condicionado sus trayectorias y convierte el duelo en un examen de máxima tensión, donde cada error puede costar muy caro.
En ataque las miradas apuntan a dos futbolistas clave: Álvaro Montejo, máximo goleador del Jove y del grupo con seis tantos, y Cristian Herrera, uno de los jugadores más determinantes del Alzira en los últimos partidos. La aportación del recién incorporado Pablo Ruiz también genera expectación en San Vicente tras sus primeros minutos ante el Saguntino.
Urgencia compartida en una clasificación asfixiante
La igualdad en la zona baja provoca que una derrota pueda tener consecuencias inmediatas. Del Crevillente, colista con nueve puntos, al Utiel, undécimo con doce, hay apenas tres de distancia. Un solo mal resultado puede arrastrar a cualquier equipo al fondo de la tabla. De ahí que para Jove y Alzira este partido tenga aroma de duelo directo, casi de final anticipada en diciembre.
Con dos proyectos que buscan estabilidad, dos banquillos recién rearmados y un margen de error mínimo, el Ramón Asensi Juan vivirá un encuentro donde la urgencia, la necesidad y el momento anímico pueden pesar tanto como el juego. El partido del domingo no decidirá el futuro de nadie, pero sí puede marcar el rumbo inmediato de dos equipos que necesitan creer, sumar y respirar.
