Alegría inmensa en Sanlúcar de Barrameda. Tras unas semifinales vibrantes, el Atlético Sanluqueño se ha clasificado para la final por el ascenso a Primera Federación después de ganar tanto el partido de ida como el de vuelta. Eso sí, ni mucho menos ha sido una eliminatoria sencilla, ya que el filial del Valladolid ha vendido bien cara su piel.
el equipo ha demostrado que no le tiembla el pulso en los partidos importantes y ha remontado un resultado adverso
El equipo de Antonio Irondo llegaba al playoff con una racha espectacular: cuatro victorias en los últimos cinco partidos. Tras finalizar cuarto en la tabla, no contaba con el factor campo a su favor, pero hoy en los campos anexos al José Zorrilla el equipo ha demostrado que no le tiembla el pulso en los partidos importantes y ha remontado un resultado adverso.
Y es que los pupilos de Julio Baptista ya habían empatado la eliminatoria con un gol de penalti a los 14 minutos de juego. Slavy no se puso nervioso y desde los once metros anotaba el primer gol del partido. Sin embargo, pronto habría una nueva pena máxima, pero esta vez a favor de los visitantes: el encargado de transformalo fue Zeki Díaz, que ponía de nuevo al Atlético Sanluqueño por delante en la eliminatoria.
Al filial del Real Valladolid tan solo le valía meter un gol para forzar la prórroga, y es por ello por lo que en los instantes finales se lanzaron al ataque. Precisamente esta necesidad de jugárselo todo a cara o cruz permitió que el Sanluqueño sentenciase el choque con un tanto de Franco Santana en el minuto 89, que significaba el pase a la final de los andaluces.
Ahora, el equipo de Iriondo espera rival en la segunda y última eliminatoria por el ascenso a Primera Federación. Después de dejar por el camino al Real Valladolid Promesas sin ser favoritos y con el factor campo en contra, se han demostrado a sí mismos que son capaces de todo y saldrán sin miedo en este segundo cruce. En Sanlúcar ya se visten de gala para hacer de El Palmar un auténtico infierno.