Aunque a primera vista pueda parecer que el mundo del fútbol y la industria de los casinos no guarden relación alguna, lo cierto es que los lazos que unen ambos sectores existen y son bastante fuertes. Incluso en la actualidad, una época en la que las salas de juego han dado paso a cómodas plataformas en línea que ofrecen una gran variedad de metodos de pago y abultados catálogos con juegos, tragamonedas y modalidades en vivo, casinos y fútbol se retroalimentan de diversas formas. Así, dos industrias capaces de mover grandes cantidades de dinero gracias al elevado número de seguidores que poseen son capaces de, mediante esta relación, generar más ganancias todavía.
Patrocinio y publicidad
En el deporte profesional, los espacios publicitarios se han convertido en un factor de gran relevancia a la hora de obtener ingresos, algo que no debe sorprender a nadie. Después de todo, si hablamos de disciplinas como el fútbol, el seguimiento de los partidos puede llegar a ser muy elevado, especialmente cuando se trata de partidos importantes. Podemos ver ejemplos como los clásicos de La Liga, que despiertan gran emoción, o las finales de torneos de renombre.
Todos ellos tienen un enorme seguimiento, tanto en directo como a través de televisión e internet; así, si nos atenemos a las reglas básicas del marketing, es perfectamente entendible que muchas marcas estén dispuestas a pagar cifras elevadas para que su publicidad esté en el campo o en las camisetas de los jugadores, a la vista de millones de espectadores.
Y aquí es donde entra en escena el mundo de los casinos. A lo largo de los últimos años, cada vez se ha vuelto más habitual que las plataformas de juego y de apuestas deportivas estén presentes en la publicidad de los campos. Y eso, a su vez, se ha extendido al patrocinio de los equipos. Algunos ejemplos los encontramos en el Bayern de Munich o en el Real Madrid, equipos que no han dudado en lucir los nombres de plataformas de juego en su equipamiento.
Los futbolistas, grandes aficionados a los casinos
La relación entre el mundo del fútbol y la industria de los casinos no termina en el terreno formal y económico, porque va más allá. En realidad, se podría decir que es una relación bidireccional, ya que, así como los casinos recurren al fútbol, este último (o más concretamente, los futbolistas) acuden a menudo a los casinos.
Sí, son numerosos los jugadores de fútbol que han expresado abiertamente su afición a los juegos de casino. Podemos encontrar casos notorios, como Gerard Piqué, gran aficionado a los juegos de cartas, o Neymar Jr. Son muchos los que muestran una gran predilección por el póquer, aunque otros, como Cristiano Ronaldo, han expresado adorar otros juegos de casino.
Lo cierto es que la relación entre el deporte y el juego es bastante fuerte. Por eso, al pensar en uno, es habitual acordarse del otro. Los jugadores de fútbol acuden a los casinos en busca de emoción y diversión, e incluso prestan sus caras para publicitarlos. Y los casinos, a su vez, recurren a los espacios ofrecidos por el deporte rey para darse a conocer. Se trata de una relación simbiótica que, en realidad, beneficia a todo el mundo.