Fran Fabre es el capitán del Épila C.F.. Natal de Épila, siempre ha tenido un estrecho vínculo con el equipo de su pueblo. En la actualidad, es el capitán del conjunto emblema de Valdejalón y tras conseguir su tercer ascenso en su localidad, disputa su enésima temporada en el club con la ilusión intacta. Este año con doble valor: temporada post-ascenso y Copa Del Rey.
P: ¿Cómo estás viviendo esta situación?
Imagino que como todo el mundo. Es una situación muy rara y hay mucha incertidumbre porque no ves la luz al final del túnel. Es todo tan raro… No estamos bien.
P: No se puede jugar pero sí que se puede entrenar. ¿Vosotros estáis entrenando?
No, nosotros no estamos entrenando. Desde que el jueves se promulgó el estado de alarma en Zaragoza dejamos de entrenar. Yo soy del pueblo y como yo estamos tres más. También de La Almunia. Hay 6 o 7 de fuera y no nos podemos juntar todos. Entrenábamos en zaragoza y ahora no podemos juntarnos.
P: Sin embargo hay otros equipos que sí que lo hacen. ¿Estáis en desventaja?Claro. Yo sé que el club ha estado hablando con la Federación a ver si existe algún permiso para poder desplazarnos a Zaragoza.
«De momento no ha habido contestación y está todo por el aire»
P: ¿Ves lógico que se aplazara la liga?
Yo no veo nada lógico en todo esto. Se empieza la competición y a la semana la cancelan. Además no sabemos si se reanudará, cuándo se reanudará… Es un lío.
P: ¿Crees que con las medidas que se estaban tomando se podía afianzar la seguridad?
Siendo responsables individualmente, sí. Si tienes algún síntoma o algo por el estilo lo comunicas y ya está. No vas a entrenar ni a jugar y no tienes peligro de contagiar a nadie. Las medidas que nos habían hecho tomar antes y después yo creo que eran seguras. Hemos estado jugando partidos y no ha pasado nada. Aquí no ha habido nada.
P: La pasada campaña ascendisteis. ¿Cómo llegabais esta temporada?
Yo que soy del pueblo veía que era una temporada muy ilusionante. La directiva ha hecho muy buen equipo, la verdad. Han intentado ilusionar a la gente. Además teníamos jugadores contrastados en Tercera y muy buen ambiente. Estamos a expensas de qué va a pasar, porque el 29 de octubre es el sorteo de Copa y estamos clasificados como campeones de grupo. Nos han avisado de que se realizará el sorteo. Pero actualmente ni podemos entrenar. No sé qué pasará.
P: Si pasáis las primeras rondas iría a Épila un equipo de primera. ¿Cómo sería eso para el pueblo?
La gente está bastante ilusionada con esto. Es extraño porque igual tendría que jugarse todo sin la gente. La afición está esperando a ver hacia dónde va el tema y cómo se resuelve todo. Es un partido que te viene un primera. Al pueblo no, porque el campo no está para jugar, pero hay muchas ganas.
«Tanto para el pueblo como para los jugadores es un aliciente muy especial»
P: ¿Cómo se vive un ascenso tan descafeinado como el del año pasado?
Ha sido mi tercer ascenso con el Épila y ha sido el más extraño. Ha tocado en medio de la pandemia y no pudimos celebrarlo con la emoción del momento. Nadie nos tiene nada que achacar porque el equipo iba para arriba. Cuando se pudo, nos juntamos a comer todos y ahí lo pudimos celebrar.
P: ¿Qué aspiraciones tenía este año el Épila?
Nuestra aspiración era competir cada partido al máximo con total ilusión. Teníamos que continuar siendo el equipo que éramos en pretemporada. El objetivo era la salvación, pero nunca nos hemos puesto ningún techo.
