El propósito del Gimnástica de Torrelavega -la decana del fútbol cántabro- es ascender a Segunda División B, como hiciera hace tres temporadas con Pablo Lago en el banquillo. Este año, el míster es distinto. Pero Carlos Docando no es nuevo en esto. El técnico vasco ya consiguió un ascenso a la categoría de bronce con el Sestao River, y lo rozó con el Club Portugalete. Además, ahora le han rodeado de gente muy capacitada para ese objetivo. El último, Chuchi Cos. El cántabro logró subir al Deportivo Alavés a Primera División.
El de Maliaño fue jugador de Barakaldo CF, Xerex CD, CD Numancia, Pontevedra CF, SD Noja y CD Tropezón. Solamente dos años después de concluir su etapa vistiéndose de corto, pasó a vestirse de traje. En 2002 comenzó su etapa como entrenador en el Palamós CF. Del club catalán, regresó a su tierra para dirigir al Racing de Santander en Primera. Tenía una estrecha y cercana relación con Dimitry Piterman. Un empresario ucraniano-estadounidense que no dejó muy buen recuerdo en El Sardinero.
Después de presidir al cuadro verdiblanco, puso rumbo a Vitoria, donde se convirtió en presidente del Deportivo Alavés. Debido a su amistad con Chuchi Cos, puso al cántabro al frente de la plantilla en Segunda División. Una oportunidad que no fue desaprovechada, ya que conisguió ascender. En varias ocasiones, fue cesado, y al poco tiempo nombrado de nuevo como técnico del equipo alavesista hasta que, finalmente, en la temporada 2006/2007 se desvinculó del club de manera definitiva.
Ahora, ayudará a Carlos Docando en la Gimnástica de Torrelavega no oficialmente. Esto se debe a la falta de fichas disponibles en los de la Comarca del Besaya. De todos modos, asistirá a los entrenamientos y a los partidos, donde echará un cable en la búsqueda de la promoción al fútbol profesional. La decana camina en tercera posición del Grupo A con 28 puntos, a únicamente uno del segundo clasificacio, y a 6 del líder, el CD Tropezón, uno de sus ex equipos.
