Temporada durísima para el filial del Club Deportivo Numancia. A falta de tres jornadas para finalizar la competición, el equipo de Pablo Cortés ya es oficialmente equipo de Preferente. De esta manera, el objetivo del club desde este momento es ascender lo más pronto posible a Tercera RFEF para volver a competir en las categorías de la Federación Española.
El descenso se ha certificado de forma matemática después de la derrota de los numantinos en casa por 0 a 3 frente al filial de la Ponferradina. A este resultado hay que añadirle las victorias de Palencia y Becerril (ambas por la mínima) que han dejado la salvación a nueve puntos de distancia cuando quedan estos mismos por disputarse, pero el Numancia B tiene el average perdido con el Atlético Bembibre.
En el último encuentro, la Ponferradina B fue muy superior en todo momento, pero los colistas aguantaban el empate en el resultado. No obstante, un gol de Lembezat al filo del descanso desmoralizó por completo a los de Soria, que después en la segunda parte encajaron dos goles más. Los más amargos de la temporada, pues suponían el descenso matemático.
Si bien es cierto que la prioridad siempre es el primer equipo, para el Numancia no es nada positivo que su filial baje a competir en Preferente. En contextos económicos complicados la cantera siempre es una salida para seguir montando un equipo competitivo, pero si el filial compite en la sexta categoría del fútbol español es complicado que salgan estrellas.
En contextos económicos complicados la cantera siempre es una salida para seguir montando un equipo competitivo
La reconstrucción no será sencilla, pero desde este momento el Numancia ha de trabajar para volver a ser un equipo del, fútbol profesional. Se trata de un histórico de nuestro deporte, por lo que la confianza de los aficionados es que tarde o temprano volverá.
