El Club Deportivo Numancia cometió el grave error de vender la piel de oso antes de cazarlo. El equipo soriano estaba prácticamente salvado a dos meses de terminar la competición, pero un final de temporada desastroso ha provocado que baje a Segunda Federación contra todo pronóstico, lo que es uno de los momentos más delicados de la historia del club.
un final de temporada desastroso ha provocado que baje a Segunda Federación contra todo pronóstico
Los numantinos han visto a su equipo jugar en el fútbol profesional prácticamente toda su vida, y ahora tienen que vivir cómo caen relegados a la cuarta categoría del fútbol español, un auténtico drama. Lógicamente, este final de curso ha traído consecuencias en el organigrama deportivo e institucional del CD Numancia, y la primera ha sido la no continuidad de su director deportivo: Rubén Andrés.
El club ha anunciado a través de su cuenta oficial de Twitter que no seguirá con sus habituales tareas dentro de la entidad. También lo ha anunciado él mismo en una rueda de prensa que ha ofrecido donde ha aprovechado para pedir disculpas a la afición por lo sucedido esta campaña. La propia afición, como no podía ser de otra manera, está muy enfadada con su equipo.
Ahora el Numancia tiene por delante la difícil tarea de rearmar un equipo competitivo para estar el menor tiempo posible en Segunda Federación. Un club con su masa social y con su historia no puede deambular de esta manera por los campos españoles, y por lo tanto necesita una estabilidad institucional que le permita volver al fútbol profesional, donde ha pertenecido siempre.
