CD Becerril y CD Palencia Cristo Atlético disputaron el partido más entretenido de la tercera jornada en el grupo VIII de Tercera División.
El duelo entre los dos equipos palentinos terminó con un histórico marcador de 3-4. Pese a que el Cristo At. se adelantó en el marcador, el Becerril llegó a ponerse 3-1 en el minuto ochenta. Sin embargo, los de La Balastera tiraron de heroica y anotaron tres goles en diez minutos para sumar su segundo triunfo del curso.
Abel Pascual, capitán del Cristo Atlético, pone voz a la remontada y explica los motivos que le llevaron a continuar en el equipo pese a tener ofertas de Segunda División B.
P.: ¿Cómo viviste la remontada ante el CD Becerril?
R.: Fue una locura. En todo el tiempo que llevo jugando al futbol en estas categorías, nunca había vivido una remontada como la del otro día. Cuando encajamos el 3-1 estábamos k.o., pero tiramos de heroica y a los pocos minutos tuve la suerte de meter el 3-2. A partir de ahí empezamos a ganar confianza y vimos que se podía… Y en cuestión de diez minutos metimos tres goles.
P.: Curiosamente os adelantasteis en el marcador.
R.: Estuvimos muy bien durante la primera media hora. Movíamos rápido la pelota, jugábamos en campo rival y en el minuto veinte nos adelantamos. Sin embargo, en una jugada aislada dentro de nuestra área nos pitan penalti; nos empatan y eso nos condiciona mucho.
Después de esto, el partido entra en tierra de nadie, se juega en el centro del campo y las áreas pasan a no tener influencia. En la segunda mitad empezamos algo mejor que ellos pero, de nuevo en un despiste, tenemos una pérdida y nos meten el 2-1. En ese momento nos vamos del partido.
Sufrimos mucho durante los siguientes veinte minutos y nos meten el 3-1 en una jugada absurda que no podemos permitir. Tiramos de casta y coraje y, pese a que no fue nuestro mejor partido, terminamos por remontar.
P.: ¿Qué cambia para pasar de encajar el tercer gol a meter tres en los siguientes diez minutos?
R.: El 3-1 fue un jarro de agua fría pero hablamos entre nosotros y dijimos: «quedan diez minutos, vamos a intentarlo». Paso a ponerme de delantero y colgamos muchos balones al área; sorprendentemente el Becerril, que es un equipo que se siente a gusto cuando defiende con mucha gente cerca de su área, vimos que no estaba cómodo. Tuvimos la suerte de hacer el segundo al poco tiempo de recibir el tercero; luego empata Adrián, y acto seguido preguntamos al árbitro cuánto quedaba. Nos dijo que dos minutos y fuimos a por el siguiente gol.
P.: Dices que es la remontada más especial que has vivido.
R.: Es un cúmulo de muchas cosas: un derbi entre los equipos de más entidad de la provincia de Palencia, sumas que estás perdiendo 3-1 a falta de diez minutos… Es una remontada que voy a recordar toda la vida.
P.: De no haber ganado, ¿os hubiese generado dudas el arranque de liga con solo tres puntos?
R: Sí, para que veas cómo es este deporte… De no haber conseguido los tres puntos, la situación hubiese sido otra completamente. Lo normal hubiera sido perder el partido, no haber sumado ninguno y tener solamente tres puntos de nueve posibles; lo que nos alejaría de la parte alta de la tabla. Pero esto es el fútbol…. Es el deporte rey por este tipo de cosas.
P.: ¿Cuál es el objetivo que se ha marcado el Cristo Atlético para esta temporada?
R.: Este año tenemos que tener esa confianza en nosotros mismos e ir a ganar cada partido; debemos ser protagonistas en todos los encuentros porque contamos con una plantilla hecha para ello. Luego ya se verá, pero lo que tenemos que pensar es en ganar cada partido y, a partir de ahí, si hacemos las cosas bien partido a partido, podremos hacer cosas bonitas. Me gusta la filosofía del Cholo, estoy muy de acuerdo con ella.
P.: La última, capitán. Te quedaste en el equipo pese a tener ofertas de Segunda B.
R.: Sí, estuve a punto de firmar en Segunda B, pero en el último momento no se dio. Vi la situación que se daba en el equipo, además soy de Palencia y el club que más siento en el corazón es el Cristo Atlético; vi que era una buena ocasión para dar un golpe sobre la mesa y tratar de recuperar la ilusión que Palencia tenía perdida en el fútbol. Todo eso hizo que decidiese quedarme aquí, estoy muy satisfecho y contento.