Esta mañana nos levantábamos con una noticia publicada en el diario Mundo Deportivo en el que se acusaba a la FCF de retener subvenciones de la RFEF a clubes de Segunda y Tercera RFEF por no ser afines a la propia federación que actualmente dirige Joan Soteras.
Sin embargo, la Federación no ha tardado en responder y ha a emitido un comunicado, a través de sus redes sociales, en el que informa de cuáles son las condiciones que deben darse para que un club pueda cobrar las subvenciones, por lo que expresa los motivos por los que no han recibido ese dinero.
las condiciones para poder cobrar las subvenciones
Según cuenta la FCF hay distintas situaciones que deben darse para poder cobrar esta subvenciones y son las siguientes: «Estar al corriente de pago y de sus obligaciones ante la Agencia Tributaria Estatal, Haciendas Locales y Forales o de su respectiva comunidad autónoma y con la Tesorería de la Seguridad Social, de acuerdo con la normativa aplicable,
no deber cantidades a la RFEF, ni a la federación autonómica y/o territorial respectiva, no tener embargos o cualquier otro requerimiento judicial o administrativo que impida la transferencia de fondo de la Federación al Club y no tener suspendidos los derechos federativos, ni tener ninguna medida cautelar de suspensión de prestación de servicios por parte de la RFEF«.
En su comunicado, la FCF expresa que cuando la RFEF transfiere a la FCF las cantidades económicas correspondientes a estas ayudas, sólo está autorizada a hacer el pago a los clubes de Tercera y Segunda División RFEF, si cumplen todas las condiciones anteriormente nombradas
«En consecuencia, la FCF no «retiene» subvenciones en ningún club, cuestión diferente es que no se autorice el pago a un club que no cumple las condiciones para poder percibir la subvención». Un lío más para la FCF, que ha querido tratar de solucionar rápido dando las explicaciones que consideraban oportunas. Habrá que estar atentos a la resolución del conflicto y de si las explicaciones de la Federación convencen a los «clubes afectados», o si por lo contrario, vuelven a la carga.
