Los de Alejandro San Isidro se llevaron un triunfo de oro en la jornada 13 (2-3) gracias a dos golazos de falta de Mangel y a un penalti transformado por Ducó. El AC Torrellano, que empezó la liga como líder indiscutible, vuelve a caer en un momento delicado.
Dos equipos que llegaban necesitados
El duelo en el Municipal el Altet enfrentaba a dos equipos necesitados, pero por motivos distintos. El Athletic Club Torrellano llegó a mandar en el Grupo VI durante las primeras semanas, aunque se presentó a la jornada 13 con una sola victoria en sus últimos seis partidos. El Buñol, por su parte, acumulaba siete jornadas sin ganar y veía cómo se alejaban sus opciones de engancharse a la zona noble.
El Torrellano golpeó primero y lo hizo por partida doble. Antes del descanso, Raúl Ruiz y Salah dejaron el choque 2-0 y encarrilaron un partido que parecía destinado a calmar la crisis local. Pero el Buñol no estaba dispuesto a rendirse otra vez. El equipo de Alejandro San Isidro salió del vestuario con otra cara y encontró pronto la forma de cambiarlo todo.
Mangel marcó dos golazos de falta
Mangel comenzó la remontada con un golazo de falta que recortó distancias y dio vida a los visitantes. El Buñol creció, empujó y encontró el empate desde los once metros cuando Ducó convirtió el 2-2 en el minuto 70. Y solo seis minutos después llegó el estallido: otro golpeo magistral de Mangel, segunda falta directa a la escuadra, certificó una remontada épica y un triunfo que vale muchísimo más que tres puntos.
El Buñol recupera sensaciones, rompe su mala racha y se coloca a solo cuatro puntos del playoff. El AC Torrellano, en cambio, acumula ya siete partidos con un solo triunfo y sigue perdiendo terreno en un curso que empezó de manera muy diferente.
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