Empate en Castalia y otra oportunidad perdida por el Castellón para salir de descenso. Tras una primera parte muy cerrada y sin ocasiones, los locales desperdiciaron su ventaja en el marcador para acabar cediendo otro empate. Foto: CD Castellón. 

Se preveía un partido cerrado, con pocas concesiones dados los antecedentes del Olot, equipo que encaja poco y marca menos, a domicilio. Los de Cano fueron incapaces de superar inicialmente el entramado defensivo de los de Garrido en un primera parte huérfana de oportunidades y con los metas casi inadvertidos.

Es cierto que con el paso de los minutos los albinegros encontraron el mejor camino para agrietar el sistema defensivo rojillo entrando por bandas. Así empezó a llegar el peligro. Óscar lo intentó con un disparo desde fuera que no encontró palos, después fue César quien en posición forzada remató cerca del palo. Poco cosa hasta el descanso.

El propio César fue el que abrió el cielo para los de Castellón nada más empezar el segundo periodo. Centro de Óscar y César aprovecha el error de Ginard para cabecear a la red. Gran parte del trabajo parecía hecho; la razón sencilla el Olot apenas había inquietado y sus precedentes decían que solo había marcado seis goles en todas sus visitas anteriores. Nada más lejos de la realidad. Gol del olot en su primera ocasión clara, Alfredo ejecutaba a Campos. Volver a empezar.

Tras unos minutos insulsos y con mucho parón y poco juego volvió a aparecer Ginard para aliarse con los de casa. Regaló un balón en la frontal a cubillas quien de primeras disparó a puerta vacía pero milagrosamente sacó bajo palos un defensor. Se animaban los de casa, un par de centros desde la derecha estuvieron cerca del gol; uno, un centro chut que despejó el meta, otro un balón al primer palo que sacó la defensa cuando se aprestaba a rematar Cubillas.

El segundo no llegó para el Castellón aunque sí para los de Girona, centro desde la derecha al primer palo y el balón a la red para helar Castalia; por fortuna el tanto acaba siendo anulado.
Empate, del mal el menos, dos partidos consecutivos en casa que se saldan con la suma de un solo punto. Cada vez queda menos y aunque cerca de la salvación, no se consigue abandonar el descenso.