Hemos hablado con el bravo futbolista murciano, junto al que hemos desgranado su brillante trayectoria. En la misma destacan los ascensos a Segunda División con el Real Murcia y el Alicante y ahora lo intentará con el Eldense. Cañadas nos cuenta todo esto y mucho más, salpicado también por alguna anécdota simpática. Xavi Barrachina
Próximo a cumplir 35 años, ¿cómo se comporta tu estado físico Toni?
De momento me sigue acompañando, como durante toda mi carrera. Únicamente he tenido una lesión grave, pero tuve la “suerte” de que se produjera joven, con veintiún años, cuando se curan mejor y no me ha dejado ninguna secuela.
¿Qué lesión fue?
Una fractura de peroné. Me rompí el tobillo literalmente. Mi primera rotura muscular la sufrí con treintaiún años… (Risas). Todo lo demás, algún esguince leve. Creo, que aparte de tener suerte, influye que siempre me he cuidado al máximo. En este tipo de fútbol, muy físico, si no te cuidas no tienes nada que hacer, es vital.
Comenzaste a jugar a fútbol en tu ciudad, San Javier.
En realidad soy natural de Albudeite, aunque desde muy pequeño me crie en San Javier. Allí comencé en esto del fútbol jugando en la AD Mar Menor, en alevines. Allí me formé hasta la edad de juvenil, donde fiché con el Murcia, donde hicimos dos buenas temporadas, clasificándonos para la Copa del Rey.
¿Cómo te defines como futbolista?
Mi punto fuerte siempre ha sido el trabajo. Soy muy trabajador en el campo y todo lo que he conseguido me lo he currado yo, nadie me ha regalado nada. Soy un apasionado de este deporte y no escatimo ningún esfuerzo cuando estoy en el césped, tanto en los entrenamientos como en los partidos. En el balón parado he conseguido muchos goles, pero considero que tengo más virtudes que únicamente esa faceta del juego. Creo que manejo bien el balón técnicamente. Quizás mi punto débil o negativo ha sido siempre mi temperamento. Ha sido mi cruz, pues me ha costado muchas expulsiones. Les protesto mucho a los árbitros, cosa que no he logrado pulir con los años.
¿Cuál fue tu primer club como amateur?
Tras la etapa juvenil en Murcia volví al Mar Menor, que estaba en Tercera División. Después me fichó el Elche y jugué en el Ilicitano. Estuve cuatro temporadas allí, incluso debuté con el primer equipo marcando un gol que a la postre significó la permanencia en Segunda del equipo franjiverde.
Más tarde llega tu etapa en el CD Toledo, en la que protagonizáis una gesta en la Copa del Rey, ¿verdad?
Así fue. Eliminamos al Real Madrid ganando en el Salto del Caballo por 2-1. Jugaban en aquel Madrid César de portero, Sanchís, Hierro, Ribera, Savio, Morientes, etc… Lo negativo de mi época en Toledo fue la lesión que te comenté al principio. Estuve casi un año sin poder jugar e incluso me planteé dejar el fútbol. Pero mi padre insistió en que continuara y por suerte le hice caso, fichando de nuevo por el Mar Menor.
Allí tuviste como técnico a Juan Ignacio Martínez.
Cierto. Gran parte de culpa de que siguiera jugando fue de Juan Ignacio Martínez. Él me metió en la cabeza que esto del fútbol se me daba muy bien y que debía seguir jugando. En el plano deportivo hicimos muy buena temporada, aunque en el play-off nos eliminó el Alcoyano.
Posteriormente fichas por el Sabadell, allá por el 2004. ¿Qué recuerdos tienes de aquella época?
En Sabadell pasé dos años buenísimos a nivel personal, aunque no fue así en el rendimiento colectivo del equipo. El primer año sufrimos, pero logramos mantener la categoría. El segundo no lo conseguimos y descendimos a Tercera, un desastre. Marqué diez goles una temporada y dieciséis en la siguiente y eso me sirvió para que varios equipos se fijaran en mí.
¿Y por cuál de ellos te decidiste Toni?
Pues por el Jaén, donde coincidí con Jordi Vinyals. Fue un gran año, pero el tema económico, que por cierto siempre me ha dado la espalda en muchos de los equipos por los que he pasado, influyó negativamente en el rendimiento final. La comunión con la afición fue espectacular, pero fue una lástima que esos problemas económicos no me permitieran seguir en Jaén.
Y apostaste por el Alicante, donde coincidiste con varios futbolistas que ahora militan en el Grupo VI de Tercera, como Cavas o Béjar.
La verdad es que se hizo un gran equipo en el que estaban como tú dices Fernando Béjar y Ricardo Cavas, ahora en el Novelda ambos. También tenía como compañeros a gente como Urbano, Santos, Álvaro García, Unánua, Azcoitia, etc… No sólo ascendimos a Segunda División, lo cual fue histórico, sino que nos enfrentamos de nuevo al Real Madrid en Copa del Rey, haciendo un gran papel en aquella competición.
¿Continuaste en el Alicante tras el ascenso a Segunda División?
Me quedaba otro año de contrato y pensaba que iba a seguir. Además hice buena temporada, incluso marqué once goles, pero dos semanas antes de empezar los entrenamientos Manolo Jiménez me comunicó que no seguía en el club. No entendí aquella decisión y muchos de mis compañeros tampoco. Incluso me apoyaron con un “plante” como medida de protesta, lo cual siempre les agradeceré. Tanía alguna oferta, pero recién casado y en casa no me quería ir.
Aquella decisión te llevó al Poli Ejido.
Sí. Yo tenía un buen cartel en Segunda B, incluso tuve algún contacto con Luís García, entonces en el Levante, que no fructificaron porque por aquel entonces el Levante no era el de ahora, pues pasaba por complicaciones institucionales y económicas. En el Poli Ejido hicimos un temporadón el primer año, con Molina, Juli, Miquel Rico, Gaitán, etc… un equipazo. Nos clasificamos para el play-off, con Óscar Cano que ahora está en el Betis B, aunque no conseguimos el ascenso, eliminándonos en Barça B de Luis Enrique. Como dato curioso dijo el técnico azulgrana que quien pasara aquella durísima eliminatoria ascendería a Segunda División. Pero como casi siempre, el estigma que me perseguía con el tema económico se volvió a repetir.
Pero en esta ocasión, salir de un equipo te hizo feliz, pues recalaste en el Real Murcia.
Soy murciano y no soy seguidor de ningún equipo de Primera División. Mi equipo del alma es el Real Murcia. Firmé con ellos en Segunda B, tras un descenso. Fuimos campeones del Grupo y en el play-off ascendimos eliminando al Club Deportivo Lugo. Me costó entrar al principio, pero conforme pasaban las semanas me aclimaté y estuve genial, marcando muchos goles además. Fue una lástima que Iñaki Alonso no considerara que tuviera que seguir en el Murcia en Segunda División, y tuve que abandonar el club literalmente entre lágrimas. Tengo que agradecer al fisioterapeuta Arturo Rubio que consiguiera que jugara los últimos partidos, tras una rotura inoportuna, que consiguió curarme en tiempo récord.
¿Qué recuerdos tienes de tu paso por el Alcoyano, que fue tu siguiente destino?
Pues fue una verdadera lástima que perdiéramos la categoría, tras el ascenso el año anterior a Segunda División. Jugué más de veinte partidos, pero nunca conseguí ser titular indiscutible para David Porras. No me sentí útil al equipo en todo el año, aunque creo que la afición, a la que igualmente respeto muchísimo, centró sus críticas en mi sin demasiado motivo. Desde aquí quiero agradecer al Alcoyano la oportunidad de jugar en Segunda y lamento mucho que la afición no comulgara conmigo porque estaba deseoso de jugar en El Collao porque ya había jugado allí como visitante y me atraía muchísimo la idea de defender esos colores en un estadio donde se vive tanto el fútbol.
Vuelves a tu tierra murciana, concretamente al Cartagena.
Sí, acababan de descender de Segunda y el objetivo era volver a recuperar la categoría de plata. Acabamos en segunda posición en liga. Considero que hubo dos partes muy diferenciadas. Con Pato de entrenador la trayectoria fue muy buena al principio, pero los malos resultados más adelante acabaron con su destitución. Con Pato lo jugué absolutamente todo, no así tras la llegada de Pacheta, al que por supuesto no reprocho nada. Su propuesta de fútbol era totalmente distinta a la de Pato y eso me pasó factura por mis características. A pesar de echar al entrenador en el último partido de liga, hicimos play-off, pero nos eliminaron en la primera eliminatoria.
Tras la etapa en Cartagonova, comienzas a valorar otras cosas, no únicamente los aspectos futbolísticos.
Totalmente. En estos tiempos, y tras lo que me había pasado en muchos clubes con los problemas económicos y los impagos, no merece la pena salir de tu zona con la edad que tengo yo. Había empezado a estudiar en Derecho en Elche y fiché en Orihuela. Pese a haber estado sólo unos meses en Orihuela, estoy tremendamente agradecido al club y la afición por cómo me han tratado y las facilidades que me dieron para salir en diciembre al Eldense. La gente que está en la junta directiva está ahí por verdadera vocación y amor a los colores. Les cuesta muchas horas de su tiempo y eso hay que valorarlo en su justa medida.
¿Cómo se produjo ese cambio de camiseta, que no de grupo, del Orihuela al Eldense?
Tengo que decir que Galiana, que es de Elche, ya mostró interés antes de empezar la temporada, pero yo estaba escuchando ofertas todavía. No quería bajar a jugar en Tercera todavía. Al final fiché en Orihuela y estuve muy a gusto allí hasta que en diciembre me llamó Mario Rosas como director deportivo y me hizo una oferta irrechazable, a pesar de estar en la misma categoría. La oferta era inusual, teniendo en cuenta cómo está el panorama futbolístico a este nivel. Hablé con la familia y decidimos aceptarla. La plantilla y el club me aceptó como si llevara más tiempo aquí. Yo tenía ciertos reparos porque nunca había fichado en diciembre por ningún club. Me costó mucho dejar el Orihuela, pues estaba muy bien allí, pero le proyecto del Eldense a medio plazo de todos es sabido cuál es, y yo soy muy competitivo. Además, Mario, Omar y Germán me supieron vender muy bien su ilusión. Quiero dejar claro que no me fui de mala manera de Orihuela, incluso pagué mi cláusula de rescisión. Y esto lo digo únicamente porque hay personas que se merecen esta explicación.
Imagino que te alegrarás de la clasificación del Orihuela para el play-off de ascenso.
Por supuesto. He dejado muchos amigos en la plantilla, incluso vi el partido del otro día junto a algún aficionado y jugador del Orihuela. Les deseo lo mejor en la fase de ascenso, ojalá consigamos ambos el objetivo.
Vamos a hacer un receso, y nunca mejor dicho, en el tema futbolístico para preguntarte cómo ha sido eso de volver a estudiar.
Como te he dicho antes, comencé el año pasado a estudiar Derecho en Elche. Dejé los estudios con veinte años cuando cursaba COU. Pero apoyado por mi mujer Naiara, que es abogada, los he retomado ahora. Aprobé el acceso a la Universidad para mayores de veinticinco años y el año pasado pasé primero con todo aprobado. No sé cómo lo hice, pensaba que sería más complicado… (risas). Naiara trabaja en una empresa familiar, una gestoría, pero yo tengo intención de hacer algún master relacionado con el apartado de derecho deportivo.
Creo que además has comenzado una aventura empresarial, ¿verdad? Cuéntanos.
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Tenéis un hijo, ¿verdad? ¿Ya apunta maneras?
Qué va… todavía es pronto. Toni aún tiene diez meses. Pero es muy inquieto para el tiempo que tiene, me lleva loco.
¿Me puedes contar alguna anécdota que recuerdes que hayas protagonizado en un terreno de juego?
Pues con los años que tengo más de una te podría contar. Recuerdo con mucho cariño a mi abuelo Julián, que me seguía siempre que tenía partido, al igual que mis padres. Mi madre es una “hooligan” (Carcajadas). Desgraciadamente mi abuelo nos dejó hace cinco años. Pero me acuerdo de una anécdota muy graciosa en la que él intervino cuando yo era cadete. Me prometió mil pesetas por cada gol que marcara y en el minuto treinta de partido ¡¡¡ya llevaba cinco goles!!! Mi abuelo se puso en pie en la grada y mientras todos celebraban el gol él gritó “ya no te doy más, ya no te doy más” (Carcajadas). Tengo que decir que he lucido en mi camiseta J. Cañadas en honor a mi abuelo, que se llamaba Julián. La gente se preguntaba lo de la “J” si yo me llamaba Antonio. Me apena que no me pudiera ver jugar en el Real Murcia, del cual él era fiel seguidor. En otra ocasión me hicieron un marcaje al hombre. No te digo el entrenador ni el jugador porque son conocidos. Me salí del campo a propósito y él salió del campo conmigo (Risas).
Volvamos al terreno futbolístico. ¿Qué valoración haces de la temporada del Eldense? ¿A qué crees que se ha debido el “bajón” de resultados en la segunda vuelta?
El bajón en cuanto a resultados se comenzó a producir justo cuando llegamos los refuerzos en diciembre, tras una primera vuelta impoluta. La irregularidad que hemos llevado en esta segunda vuelta era impensable, pero hay que hacer una lectura en la que intervienen varios factores. El trasiego de futbolistas en un vestuario siempre desestabiliza un poco al grupo. También por supuesto los cambios de entrenador. Todos esos cambios necesitan un periodo de adaptación. Además, conforme avanza la liga es más complicado ganar los partidos, pues todos los equipos se juegan la vida conforme se llega al final. Por último, el gran colchón de puntos del que hemos disfrutado desde el principio, quizás involuntariamente nos ha llevado a cierta relajación. Pero también tengo que decir que cuando el equipo se ha enfrentado a partidos importantes donde nos jugábamos mucho o el escenario era complicado hemos respondido como frente a Paterna, Borriol o Jove Español por ejemplo. El equipo demostró su calidad.
¿Cómo has visto el grupo valenciano?
El Grupo VI es muy competitivo. Tiene ocho o nueve equipos que podrían haber estado en play-off perfectamente. Los números cuando hablamos de nuestros rivales en promoción son muy relativos, pues no cuesta lo mismo ganar partidos en un grupo que en otro.
¿Llega el Eldense a tope para afrontar esta fase decisiva del play-off?
Las promociones son siempre una lotería en gran medida. Puedes haber hecho una grandísima temporada y tirarla a la basura por un mal partido en el play-off, cosa que veo muy injusta, aunque entiendo que no hay otra forma de hacerlo… Somos un equipo muy experimentado tanto en promociones como en superiores categorías. Tenemos que tirar de eso en esta fase. No tenemos ninguna duda de que responderemos a las expectativas. El equipo está muy metido y concienciado. Incluso vimos todos juntos el sorteo. Sabemos lo que nos jugamos. Tenemos una gran oportunidad que no podemos desaprovechar, además hemos recuperado gente que estaba lesionada como Mario rosas, David Fas, Crespo, a ver si llega Chupe… Estamos todos prácticamente disponibles y eso es una gran ventaja.
Tu balance de play-offs ganados y perdidos está bastante desnivelado, ¿no?
Es verdad. He jugado siete y sólo he conseguido ascender en dos ocasiones, con el Murcia y con el Alicante, en ambos casos de Segunda B a Segunda División. A ver si este es el tercero.
¿Conocéis algo de vuestro rival en la eliminatoria de campeones, el Marbella?
Conozco a unos cuantos jugadores que tienen experiencia en Segunda B. El Marbella es un equipo muy goleador y juega muy bien a fútbol, con un estilo muy parecido al nuestro, de tener el balón. La eliminatoria está al cincuenta por cien, aunque ellos tengan el factor campo a favor. Yo personalmente prefería jugar en un campo con césped natural como el suyo, además de querer jugar primero en casa, pues las dos veces que he conseguido el ascenso ha sido jugando primero en casa.
Recientemente has sido galardonado con el Trofeo al Mejor Jugador de Tercera en la Gala de Premios Golsmedia. ¿Qué te pareció la Gala y en general nuestro trabajo?
Antes de nada, quiero felicitar a Golsmedia porque la Gala de Premios es una iniciativa buenísima. El futbolista se implica más si cabe porque sabe que hay gente siguiéndolo todas las semanas y valora su trabajo durante el año. La gran cobertura del fútbol regional valenciano que hacéis es impresionante. Para mí, personalmente es un orgullo recibir el premio pese a ser ya un veterano. Le doy mucha importancia que tanto entrenadores, como periodistas y aficionados hayan pensado que soy el mejor futbolista de la categoría. En la única comunidad en la que he visto que se siga tanto el fútbol regional ha sido en Cataluña, aunque sin un medio como el vuestro, con reportajes, crónicas, entrevistas y reportajes fotográficos impresionantes.
Por mi parte sólo me cabe agradecer el tiempo que nos has dedicado para la entrevista y desearte toda la suerte del mundo a ti y a tu equipo en el play-off que empieza ya este fin de semana.
Lo mismo digo. Gracias por la entrevista y también por la invitación a la Gala, donde tanto mi mujer como yo nos sentimos como en casa. Nos fuimos encantados. Y para finalizar, quiero animar a la afición de Elda para que acuda a apoyarnos en este partido tan importante frente al Marbella. Todos juntos somos más fuertes. Nosotros prometemos que nos vamos a dejar el alma en el campo. Si conseguimos el objetivo todos lo disfrutaremos la próxima temporada, tanto jugadores como la afición del Nuevo Pepico Amat.
