Cuando somos niños nos imaginamos la carrera futbolística perfecta. Todos queremos ser los mejores, brillar ante millones de personas y ganar todos los trofeos posibles. Pero, más tarde o más temprano, nos damos de bruces con la realidad. Solo un minimísimo porcentaje llega a la élite. Otros se quedan por el camino, llegan hasta el semiprofesionalismo o, incluso, se topan con las lesiones. Este último obstáculo es el que ha hecho terminar prematuramente con la carrera de Carlos Cervelló a los 25 años.
Carlos Cervelló Olmos (30/09/1997) es -era- un defensa central natural de Catarroja que cuenta en su currículum con distintos pasos por UD Alginet, Ribarroja CF o CE Alberic, entre otros. Ha decidido dejar el fútbol y comenzar una nueva etapa manteniéndose cerca de los campos, aunque desde un prisma distinto. El motivo por su temprano adiós: dos roturas de ligamento cruzado anterior y sus consecuencias.
tres años de calvario con las lesiones obligan a carlos cervelló a colgar las botas
Todo empezó hace tres años, cuando militaba en la UD Alginet. Allí se rompió el cruzado por primera vez. Un camino largo hacia su recuperación que concluyó diez meses después y que le permitió retornar a los terrenos de juego con el Ribarroja CF en la segunda jornada de la 20/21. Desafortunadamente, el destino le iba a deparar la misma dolencia un año y cinco meses más tarde. De nuevo, en el dique seco.
Carlos Cervelló volvió a jugar al año siguiente, en la 21/22, retornando en el derbi Vilamarxant CF – Ribarroja CF de la jornada 19. Un punto y seguido muy largo, duro y mentalmente agotador. Además, las molestias y las lesiones derivadas de las inseguridades físicas y de la merma de sus capacidades le hicieron perderse muchos otros choques. Aun así, el Alberic confió en su servicios para este curso.
Con el cuadro de La Ribera Alta ha competido en ocho encuentros en este curso, siendo titular en cinco de ellos. El último, ante la UD Canals. Finalmente, su físico y su mente dijeron basta y Cervelló decide colgar las botas. Detrás quedan tres años de duros sacrificios, de caídas y recuperaciones, de molestias y de choques con la realidad. Pero no se arrepiente: «Me quedo vacío de todas las fuerzas que quedaban en mí por recuperarme de dos graves lesiones, lo puse todo de mi parte y lo intenté hasta el final«, expresa en el comunicado escrito en sus redes.