Desde el 30 de enero el Llíria no consigue hacerse con la victoria. Ha disputado partidos de todo tipo, pero en ninguno se ha alzado con los tres puntos. No es una situación fácil a la que hacer frente, y para entender mejor la situación por la que pasa el club hablamos con uno de los jugadores más veteranos de la plantilla.
Alberto Hernández Romero (30 de abril de 1982, Llíria) (en la foto) lleva nada más y nada menos que 15 temporadas vistiendo la zamarra del equipo así que es, como capitán además, una de las figuras adecuadas para analizar una temporada que empezó ya algo complicada para los suyos: “Al principio nos costó mucho acoplarnos porque el equipo era totalmente nuevo, no nos conocíamos y por ello pienso que eso nos pasó factura”, comenta, a lo que añade “es verdad que después, con el tiempo, hemos ido mejorando dentro y fuera del campo de demasiados altibajos”.
Mientras hay algunos que buscan excusas o prefieren ocultarse bajo ellas, Alberto no es de esos: “Ahora estamos donde realmente sabíamos que íbamos a estar, soy de pensar que en una liga regular al final estás donde te mereces y en ciertos partidos puedes tener algo más de fortuna pero al final el fútbol hay días que te da y otros que te quita, por lo tanto estamos donde merecemos”.
Va un poco más allá, incluso, ya que habla de esto en términos positivos: “Lo bueno que tenemos es que desde un principio tanto el cuerpo técnico como la plantilla éramos conscientes de que estaríamos peleando hasta el final por salvarnos y eso pienso que es bueno para poder afrontar lo que queda de temporada”, explica el veterano jugador.
Y es que, muchas veces eso es lo importante, tener bien claro cuál es el objetivo del equipo ya que al final es la mejor manera de afrontar una temporada: “Ser conscientes de que luchar por la permanencia es nuestro objetivo es muy bueno ya que te ayuda a afrontar los partidos sin ningún miedo”, comenta Alberto, a lo que añade “aunque siempre esperas estar mejor y tranquilos en la zona media, al final lograr nuestra meta sería algo muy bonito, además el equipo está unido y preparado mental y físicamente”.
No obstante, todo dicho sea de paso, el defensa valenciano ve algunos puntos clave que habrían sido de gran ayuda importancia en lo que a la composición de plantilla se refiere: “es cierto que no hemos tenido una plantilla muy amplia durante todo el año y eso, en ciertos momentos, pienso que nos ha pasado factura. Después también es cierto que hemos tenido algunas bajas inesperadas y otras lesiones de larga duración que, sumado a la corta plantilla, nos ha afectado mucho, porque hemos tenido que jugar con gente fuera de su posición y no donde más rinden”.
Y si eso no fuera suficiente, otro factor a tener en cuenta: “El año pasado se retiraron varios jugadores que llevaban muchos años en el club, creo que este año nos habrían venido muy bien por su experiencia dentro y fuera del campo para poder afrontar ciertos tramos de la temporada con más tranquilidad”, recalca.
Por su parte, Alberto espera recuperarse pronto de su lesión. Fue operado del menisco el 26 de febrero y espera ilusionado poder volver cuanto antes: “De momento el 12 de abril vuelvo al traumatólogo y él ya me dirá más cosas. Ojalá me den el alta y en unas semanas pueda estar ayudando al equipo pero no lo sé, todo dependerá de la evolución de rodilla, aunque yo tengo muy buenas sensaciones y confianza” Eso sí, su ilusión y sus buenas sensaciones no le impiden ser realista al respecto: “La rodilla es la que manda ¡porque ya no tengo 20 años!, no quiero tener prisa porque no me gustaría tener una recaída ya que tengo un trabajo y sobre todo una familia a la que mantener”, sentencia.
El Llíria se encuentra ahora mismo con 28 puntos (8V-4E-14D) y se enfrentará en su próximo encuentro a un Aldaia que es colista de la categoría con la intención de sumar tres puntos y alejarse de la zona baja de la tabla.
