Sant Jordi y Castellón B se repartieron los puntos sobre el terreno de juego del Bovalar en un choque intenso, cargado de lucha y con pocas ocasiones de gol.

El Sant Jordi estaba obligado a ganar, por un lado para quitarse el mal sabor de boca tras encajar cuatro goles en Almenara la pasada semana y, además, para reengancharse a la lucha por una permanencia que los amarillos tenían a siete puntos. En frente estaba el Castellón B, que venía de sumar un punto ante la UDE aunque acumulaba ya cuatro encuentros sin conocer la victoria.

Los locales salieron muy enchufados al partido y mantuvieron a ralla al cuadro albiengro. Y es que la situación obliga a los del Baix Maestrat a no regalar ni un palmo de terreno de juego. El Castellón B intentó encontrar espacios en las pocas concesiones de los de Camilo Santos.

En este contexto el Sant Jordi se encontró con la madera y los visitantes sufrieron la expulsión de su portero Nahum, a los siete minutos de la reanudación. Tras el descanso, eso sí, los del Bovalar no pudieron superar en el marcador a un rival en inferioridad numérica a pesar de gozar con una gran ocasión en las botas de Esaú.

Este empate mantiene a los dos equipos donde estaban, a los locales en descenso y a los visitantes instalados en la zona media de la tabla. En la próxima jornada el Sant Jordi se desplazará hasta Albuixech mientras que los albinegros recibirán en casa al Puçol.