El Crevillente Deportivo está llamado a ser una de las grandes revelaciones del Grupo Sur de Tercera División. Los alicantinos han realizado un gran esfuerzo para atraer a jugadores jóvenes con mucho futuro, sin desgastarse demasiado a nivel económico. El músculo financiero de otros equipos que conforman la categoría es inigualable, por ello los blanquiazules apuestan por hombres de la casa que lleven los colores del equipo en el corazón y no en el bolsillo.
vicente valor y antOnio mateo se incorporan al crevillente deportivo
El apartado de fichajes ha sido liderado, cómo no, por la directiva, aunque Manu Sánchez ha tenido mucho que ver en la confección de la plantilla. Y es importante que así sea. A fin de cuentas, él será quien mueva las piezas y las haga funcionar. En base a ese criterio básico, el Crevillente Deportivo se ha encargado de proporcionarle jugadores a los que ya conoce. Si bien comentábamos que Chris o Mirete ya habían coincidido con él, también lo han hecho las dos nuevas incorporaciones, Vicente Valor y Antonio Mateo.
El primero de ellos fue presentado por el club en la tarde de ayer a través de las redes sociales, mientras que el segundo se oficializará en los próximos días. Ambos llegan procedentes del Novelda CF. Vicente estuvo desde el comienzo, y fue uno de los hombres más utilizados por Manu a lo largo de la temporada. Anto aterrizó después, pero su aportación al equipo fue excelente, tanto en el centro del campo como en el frente de ataque.
vicente es más técnico y posicional, y ‘anto’ más móvil y llegador
En alguna ocasión les hemos visto compartir posición en la medular. Si bien el ilicitano es un jugador más técnico y posicional, el de Elda tampoco se queda atrás. También es cierto que cada uno desarrolla una función distinta. Vicente es el encargado de bajar a recibir y crear juego, y Antonio el elegido para recibir entre líneas y finalizar las jugadas de ataque. La imaginación y el primer pase, junto a la pegada y la definición.
No obstante, hay algo en lo que ambos se parecen mucho, y es en la confianza con la que ejecutan cada acción. El zurdo cree mucho en su manejo de balón y capacidad para girar sobre sí mismo, mientras que a ‘Anto’ no le tiembla el pulso cuando está rodeado de rivales. Su potente tren inferior es una muralla electrificada para aquellos que pretenden arrebatarle el esférico. Podríamos afirmar sin miedo a equivocarnos que es uno de los mejores protegiendo el balón con la ayuda de su cuerpo.
