Por fin. Casi dos años después Jona Mejía se reencontró con el gol. El delantero malacitano estaba en el foco constante por su falta de gol tras ser una de las grandes apuestas del Hércules CF, desde su llegaba al club en el mercado de invierno del curso anterior. La temporada pasada decepcionó por no anotar ni un solo tanto en 17 partidos (12 de la liga regular más 5 en los Playoff de Ascenso), aunque es cierto que en muchos casos salió desde el banquillo en el tramo final de los encuentros.
El 19 de noviembre de 2017 era la fecha que quería olvidar de una vez por todas el atacante herculano. Aquel día era el último en el cual este jugador había conseguido marcar, con lo importante que es para un delantero, y fue en el Estadio Viejo Nervión, con el Córdoba y ante el filial del Sevilla FC. Él jugador aseguraba durante este tiempo estar tranquilo y esforzándose confiado que pronto volvería a ser autor de un gol.
Durante este verano se rumoreó y mucho sobre su futuro, y la difícil relación que tenía con Lluís Planagumà, entonces su entrenador. Al final Jona continuó, y la grada le ha intentado animar durante los partidos esta temporada para darle ese afecto que le acercara al gol. La anterior jornada se comentó mucho ese penalti que pidió lanzar a su compañero Carlos Martínez para terminar con su sequía, pero que su compañero decidió lanzarlo él.
Ahora, este pasado fin de semana ante el UE Cornellá, Jona fue el gran protagonista, por su gol que ponía fin a su maldición de cara a portería rival, y porque su tanto ha valido para que el Hércules CF sumara por primera vez dos victorias consecutivas esta temporada. Tras el partido, Jona, en los canales oficiales del club comentaba: «esta es una victoria muy importante para la moral del equipo, está el vestuario contento, y esto sirve para ganar confianza». Sobre ese gol suyo que suponía romper con su racha negativa el delantero manifestó: «lo que importa son los tres puntos, la imagen del equipo y saber sufrir en un campo tan complicado».
