Huracán CF sigue viviendo al límite, en medio de la incertidumbre total sobre su futuro inmediato. El encuentro ante el líder Reus vino acompañado de significativas escenas que se presenciaron el domingo en San Gregorio.
La cuestión extradeportiva sigue coleando y mucho en la rabiosa actualidad del club rojiblanco afincado en Torrent. Una buena muestra de ello fue todo lo acontecido antes, durante y después del partido de la tarde del domingo en el estadio torrentino con la visita del Reus Deportiu, que salió más líder de San Gregorio. En los prolegómenos del encuentro, los futbolistas de Huracán CF saltaron al césped con una pancarta grande en la que se podía visualizar un claro mensaje dirigido –de manera tan pública y notoria- a los actuales gestores del club: “Directiva dimisión=solución” (rezaba el contenido de la pancarta).
Por añadidura, tras el saque de centro del campo en el inicio del partido, los jugadores de Huracán se quedaron parados y estáticos sobre el terreno de juego durante 20 segundos, en señal de protesta por los impagos y la grave situación que atraviesa el club, recibiendo con ello los aplausos de los espectadores que acudieron a ver el encuentro, que premiaron con esa cerrada ovación los esfuerzos encomiables de una plantilla que está soportando en estos últimos meses unas circunstancias muy difíciles de sobrellevar.
A su vez, los futbolistas de Huracán CF redactaron una carta –que se repartió en las gradas antes del partido- en la que muestran su agradecimiento a la afición por su apoyo en estos momentos tan complicados, además de exigir en la misma la salida de los actuales gestores del club para que pueda entrar un nuevo inversor que está interesado en la adquisición de la entidad rojiblanca.
Y para culminar el repertorio de escenas ajenas a lo estrictamente futbolístico que se pudieron ver el domingo en las instalaciones deportivas de la Avenida Pérez Galdós de Torrent, la propia plantilla de Huracán fue la encargada, después del encuentro, de pagar al árbitro y a sus asistentes. Y para ello tuvieron que recurrir a un dinero que habían recaudado entre varias rifas y sorteos que habían ideado justamente para paliar en cierta manera tan delicada situación.
Con todo y con ello, Huracán volvió a dar la cara sobre el terreno de juego, pero no pudo evitar la derrota frente al líder Reus por 1-2 (tercera derrota de la temporada para los rojiblancos y segunda como local). Un resultado adverso que les aleja a siete puntos de la zona de “play-off” y que, en lo puramente deportivo, mete al equipo ahora mismo en la lucha por no caer a los puestos de descenso –de los que ahora mismo le separan sólo dos puntos-, o incluso al del “play-out” –con apenas un punto de ventaja-. Y todo ello, por supuesto, teniendo en cuenta que a Huracán le restaron hace poco dos puntos de la clasificación, a causa de los impagos a los árbitros. La tensión y la preocupación sigue, así pues, acumulándose en todos los sentidos en torno a Huracán CF.
