En el último partido fueron expulsados hasta cuatro jugadores por lo que Ángel Zaragoza tendrá que apañárselas como sea con el fin de que sus pupilos consigan reencontrarse con la victoria.
Última posición, 19 puntos, cuatro triunfos, siete empates y catorce derrotas. Este es el balance de los alicantinos a día de hoy. Su objetivo es complicado aunque tan solo están a cinco unidades de la plaza de ‘play-out’ y a seis de la permanencia.
En su último choque, los del Baix Vinalopó acabaron jugando con ocho jugadores. Además, esta temporada están teniendo a muchos sancionados, por lo que desde el club, se muestran descontentos con ciertos arbitrajes.
Llevan un total de cinco derrotas consecutivas y no conocen lo que es sumar tres puntos desde la jornada 17. Si su meta es estar el año que viene en Regional Preferente, tendrán que reaccionar cuanto antes y ponerse manos a la obra. Para lograrlo, tendrán por delante un total de nueve finales en las que intentarán sacar resultados positivos de todas ellas.
La primera de ellas será el próximo sábado a las 16:30 horas en casa del líder, el Rayo Ibense. Desde luego una difícil papeleta que tendrán que afrontar sin Tari, Alfonso, Gato y Dani, los cuatro expulsados. Tampoco estarán ni Marcos, por acumulación de tarjetas, ni Vargas ni Juanan, estos dos últimos lesionados.
Una tarea complicada en un momento complicado. Los juveniles tendrán que dar la cara por los que no están. Los números, mientras tanto, siguen sin decantar la balanza y mientras todo esté en juego, sea cara o cruz, pelearán por dejar bien alto el nombre del equipo. El tiempo repartirá sentencia.
