Silla e Interciy protagonizarían un duelo que, a priori, parecía decantado a favor de los alicantinos observando tan solo la tabla clasificatoria: penúltimo contra segundo. Pero el cuadro dirigido por Lledó terminó sufriendo en el Morera pese a dominar en el juego y sacar recompensa de la superioridad individual y colectiva de su plantilla. Foto: CF Intercity.
Durante la primera mitad, el Intercity llevó el tempo del partido y manejó la posesión del balón a su antojo, aunque el Silla conseguía trenzar buenas jugadas cuando robaba el esférico, sobre todo por banda izquierda. Cristian Herrera gozó de una clara ocasión de gol en torno al minuto 17, pero Ethan anduvo bien atento. El guardameta del equipo sillero cuajó un muy buen partido salvando en varias ocasiones los disparos de la delantera del Intercity. Por parte local, la primera ocasión que generó algo de peligro la tuvo Iván Bazán con un disparo que se marchó rozando el larguero.
Tras el paso por los vestuarios, Ethan volvió a salvar al cuadro sillero con una gran intervención ante el disparo cercano de Cristian Herrera. Apenas ocho minutos después, sacaría otra gran mano al otro delantero del conjunto alicantino, David Torres. El cuadro visitante mantenía la posesión y el peligro, aunque generaba más ocasiones. Finalmente, en la salida de un córner, José García remataría de cabeza solo y, ayudado por una mala salida de Ethan, anotaría el 0-1. La celebración, en la esquina donde se coloca la grada de animación sillera, no gustó a la parroquia local, que se metió en el encuentro más si cabe.
Mucha intensidad, muchos acercamientos pero pocos remates hasta los últimos minutos, donde la acuciante necesidad sillera de anotar el tanto del empate provocó varias ocasiones por el lado ‘blanquet’. En un contraataque, el balón le llegó a Iván Bazán, que puso un centro rechazado por Alexis Egea con tan mala fortuna -o buena- que se estrelló en el larguero. El Intercity se había salvado del arreón local. El duelo crecía en intensidad, el Intercity no era capaz de certificar el triunfo y los cambios del Silla funcionaban, puesto que otorgaban frescor e ideas en tres cuartos de campo. Pero las intentonas se quedaron sin recompensa. El Intercity asaltaba el Morera por la mínima y la afición recompensaba el esfuerzo de su equipo con un sincero aplauso.