Este domingo el Silla CF conseguía la victoria frente al CD Burriana (2-1) y así daba un paso adelante en su lucha por conquistar la permanencia en la Lliga Comunitat Nord. Antes de arrancar este partido se rendía homenaje a Quique Capsi, defensa de Silla que ha alcanzado los 250 partidos con la camiseta dels «blanquets». En 2015, y tras formarse en las canteras del Valencia CF y Villarreal CF y haber jugado en el Ribarroja CF y SD Sueca, llegaba al Vicente Morera este jugador que se ha convertido con el paso de las temporadas en referente de la entidad. GOLSMEDIA ha contactado con él para preguntarle por los partidos más especiales que recuerda de estos 250.
«Lo curioso es que Ricardo Peris me llamó sin saber que yo era de Silla, y en cuanto surgió la oportunidad no me lo pensé dos veces»
¿Recuerdas cual fue tu primer partido oficial en el Silla CF? ¿Cómo fue? Creo que llegaste del Sueca y fue un partido ante el Ribarroja CF en 2015 con compañeros como: Coke, Verdú, Yassine, Rubén Navarro…?
Recuerdo mis inicios en el Silla con muchísima alegría, por lo que significaba poder formar parte del club de mi pueblo. Venía del Sueca, donde estuve muy a gusto y compartí vestuario con grandes compañeros, pero como se suele decir… como en casa, en ningún sitio. Lo curioso es que Ricardo Peris me llamó sin saber que yo era de Silla, y en cuanto surgió la oportunidad no me lo pensé dos veces. En cuanto al primer partido, si te soy sincero, no lo tengo muy claro en la memoria, pero estoy seguro de que las sensaciones fueron buenas… ¡porque volví a repetir 249 veces más! Jajaja. Así que algo me tuvo que enganchar desde el principio.
«El ascenso a Tercera lo recuerdo con muchísima alegría, era de los más jóvenes y aprendí mucho con Juanito, Coke, Javi, Lucas, César, Verdú…»
Partidos especiales supongo que fueron los de la Promoción ante el Utiel en 2016 que terminó en ascenso a Tercera. ¿Cómo recuerdas los partidos de esa Promoción?
Sí, la verdad es que el ascenso a Tercera lo recuerdo con muchísima alegría. Fue un partido muy especial, rodeado de compañeros que ya eran amigos, con una grada a reventar y un ambiente increíble. Después del partido, el viaje de vuelta en autobús fue una fiesta, y el recibimiento en la plaza del Ayuntamiento fue algo que nunca se me va a olvidar. Fue un año inolvidable en todos los sentidos: en lo futbolístico, porque salíamos al campo a disfrutar, y en lo personal, porque teníamos un vestuario muy sano, muy unido. Yo era de los más jóvenes, pero estaba rodeado de jugadores con mucha experiencia como Juanito, Coke, Javi, Lucas, César o Verdú, que me ayudaron muchísimo a crecer como futbolista.
¿Recuerdas algún partido especial más en estos 250 partidos?
Sí, además del ascenso, también recuerdo con mucha intensidad el partido de promoción a Segunda B. Fue en Roda, un partido durísimo en el que luchamos hasta el final. Llegamos a la prórroga y, aunque no conseguimos pasar por la forma de clasificación, fue un encuentro inolvidable. Más allá del resultado, lo que lo hizo tan especial fue el contexto: en ese momento, en el campo, daba la sensación de que ese podía ser el último partido de la historia del Silla CF. Al final, muchas de las personas que estaban en la grada animándonos ese día, fueron quienes decidieron dar un paso al frente, coger las riendas del club y, con mucho esfuerzo, trabajo y compromiso, conseguir que el Silla CF siguiera su curso.
«He aprendido a convivir con la dificultad, a sufrir cuando las cosas no van bien, y a darme cuenta de que, aunque la vida te golpee, siempre tienes otra oportunidad de levantarte la semana siguiente»
De aquel Quique de 2015 que llegó al Silla al actual de 2025, además de experiencia en el juego, ¿Cómo crees que has evolucionado tu y qué balance haces de momento de todo lo vivido en Silla?
Estos años en el Silla me han hecho evolucionar mucho, no solo como jugador, sino sobre todo como persona. He aprendido a ser más tolerante y empático, porque he compartido vestuario con compañeros muy distintos y de cada uno he podido aprender algo, una forma diferente de ver el fútbol y también la vida. También he aprendido a convivir con la dificultad, a sufrir cuando las cosas no van bien, y a darme cuenta de que, aunque la vida te golpee, siempre tienes otra oportunidad de levantarte la semana siguiente. Y eso es algo que va mucho más allá del fútbol. Pero lo más valioso ha sido la gente que he conocido. Compañeros que, con el tiempo, han pasado a ser amigos indispensables en mi vida. Creo que, al final, eso es lo que realmente te deja el fútbol, especialmente en estas categorías: crecer como persona y rodearte de buena gente. Y cuando el fútbol se acabe, que todo eso te siga sirviendo para seguir avanzando en la vida.
«El recuerdo de este domingo va a ser de los más especiales que me llevo, fue un día muy alegre, muy emotivo»
Vamos a este Silla CF, a tu partido 250 que fue ante el CD Burriana y con victoria final. ¿Cómo viste el partido y vuestra victoria?
La verdad es que el recuerdo de este domingo va a ser de los más especiales que me llevo. Fue un día muy alegre, muy emotivo. Estuve a punto de soltar alguna lágrima antes del partido. Los que me conocen saben que no soy muy dado a este tipo de cosas, pero que el club de mi pueblo me haga este reconocimiento… me hizo sentir una persona muy afortunada por poder defender durante tanto tiempo esta camiseta. Y si a todo eso le sumas una victoria importantísima, con tres puntos que nos acercan al objetivo de la salvación, no se puede pedir más. Fue un día perfecto.
El equipo es 12º, con dos puntos de ventaja sobre el descenso, a 6 partidos para el final. ¿Cómo os ves en esa lucha por mantenerse en Lliga Comunitat?
El equipo afronta estos 6 partidos que quedan como auténticas finales. De esos seis partidos, cinco son contra rivales directos, así que está en nuestra mano. La victoria del domingo ha sido un soplo de aire fresco, nos ha dado un plus de confianza y energía. Estamos con muchas ganas de trabajar cada semana al máximo para conseguir cuanto antes el objetivo y dejar al Silla donde se merece.
Por último un mensaje «als blanquets» para que os den su apoyo en este final de temporada…
A la afición, como siempre, solo puedo darles las gracias. Están ahí en los buenos y en los malos momentos, y eso es algo que valoramos muchísimo dentro del vestuario. De cara a estos últimos seis partidos, les pediría que sigan a nuestro lado, que sigan animando como hasta ahora, porque su apoyo desde la grada marca la diferencia. Muchas veces, los últimos minutos de esfuerzo salen gracias al empuje que sentimos desde fuera, como este fin de semana, que ese aliento fue clave para sacar adelante el partido. Son una parte fundamental del equipo y los necesitamos más que nunca para lograr el objetivo. ¡Ale Blanquets!
