«El Príncipe de Alcorcón», muchos valencianistas lo recordarán por ser uno de los protagonistas del Valencia CF que regresó a Primera División tras el dramático descenso de 1986. Jugó 12 temporadas en el club che. Y seguro que muchos también tendréis grabado en vuestro corazón «blanc i negre» aquel gol ante el Español en Mestalla, en la penúltima jornada del subcampeonato en la temporada 1994/95 con Don Luis Aragonés en el banquillo. Hace unos meses recordamos sus éxitos.
Conversamos con su hijo, joven delantero de la UD Puçol, Dani Arroyo, que además de hablarnos de su club nos recuerda como vivió él esos años de éxitos sobre el verde de un centrocampista inolvidable. Y muy orgulloso nos comenta que supone para él tener de padre a una leyenda para el valencianismo.
P. Empecemos por tu equipo, la UD Puçol empató ante el Castellón B la última jornada. ¿Cómo valoráis este empate?
R. Nos faltó estar acertados de cara a portería para sumar 3 puntos. El equipo está con más ganas que nunca de volver a competir.
«Ahora estoy lesionado, y entre eso y la situación del parón de liga, tengo muchas ganas de volver a competir»
P. El equipo realizó la temporada pasada un año espectacular donde quedásteis primeros. Este año vais séptimos a 5 puntos de play-off, está todo muy reñidó esas primeras plazas. ¿Cómo ves al equipo este año?
R. Hemos tenido que superar muchas adversidades desde el principio respecto a lesiones graves, y nos ha salido caro haber puntuado mal fuera de casa en la primera vuelta. Nosotros sabemos que lo importante es que dependemos de nosotros mismos.
P. ¿Tú como te encuentra en el club?
R. Estoy muy a gusto aquí como todos los que formamos la familia de la UD Puzol. Ahora estoy lesionado, y entre eso y la situación del parón de liga, tengo muchas ganas de volver a competir.
P. Hoy día del padre, vamos a conversar un poco sobre el tuyo. Para muchos valencianistas tu padre fue alguien muy importante, todo un referente en su etapa en el Valencia CF. ¿Te preguntan mucho por él?
R. Sí, claro. Sobre todo gente que vas conociendo relacionada con el mundo del fútbol y le vio jugar.
P. ¿Cómo viviste tu de pequeño el ver a tu padre jugar en la élite?
R. Por desgracia yo era muy pequeño y no tengo a penas recuerdos de ir a verle jugar. Pero sí compartimos algunos vídeos, fotos, camisetas… y sobre todo el cariño que le demuestra la gente que le conoce, con eso me quedo.
P. Él vivió momentos malos de la historia del Valencia CF, como en Karlsruhe, y momentos muy ilusionantes, como el subcampeonato la temporada con Luis Aragonés. Y de noches como aquella en Mestalla ante el Español donde marcó un gol muy importante, que pocos valencianistas olvidan ¿Te ha hablado mucho de esas experiencias?
R. Sí que hemos hablado de partidos y de ese tan especial en concreto, él recuerda su carrera en Valencia con mucho cariño. Tampoco prioriza hablar sobre él mismo y sus vivencias, prefiere hablar sobre el día a día, en eso nos parecemos
«Ahora me sigue ayudando cada día pero con más calma, sabe que estoy disfrutando y él conmigo»
P. Él jugaba de centrocampista ofensivo o mediapunta, tu de delantero, pero ¿te da muchos consejos? ¿analiza mucho tus partidos?
R. Cuando era más pequeño sí que comentábamos más cosas sobre el partido que acababa de jugar o el que venía el próximo domingo… Ahora me sigue ayudando cada día pero con más calma, sabe que estoy disfrutando y él conmigo.
P. ¿El tener un padre futbolista de primer nivel te ha hecho ser más consciente de lo duro que es esto? De conocer que mucha gente se queda atrás, que en la élite también se pasa mal por lesiones, todas esas cosas que tienen detrás el fútbol…
R. Sí, nadie mejor que él para darme cuenta de lo complicado que es llegar a la élite de este deporte y lo que ello conlleva.
P. ¿Qué supone para ti tener de padre a una leyenda para el Valencia CF como Carlos Arroyo?
R. A mi padre le estoy agradecido por ser como es, y también, porqué no, por hacerme del Valencia CF.
P. Muchas gracias.
R. A vosotros, y me gustaría aprovechar la entrevista para felicitar de parte de todo el equipo a nuestro compañero Ernest, que está prometido recientemente y se casará el año que viene.