El Valencia CF se ha metido en un periodo de negociaciones para renovar los contratos de los jugadores que acaban su vinculación con la entidad valencianista en los próximos meses o en el verano de 2021 y tiene mucho trabajo acumulado por el vacío de poder que ha existido en el club en los últimos meses con la negociación para la salida de Mateu Alemany, que era la persona que manejaba estos temas los dos últimos años.
El club trata de renovar el contrato del tercer portero, Cristián Rivero, con el que mantiene negociaciones avanzadas y con buena sintonía por las dos partes para renovar porque acaba contrato en junio de 2020 y es urgente ampliarle. Además, el club estratégicamente tiene dos operaciones importantes que acometer con las renovaciones de Carlos Soler y Ferran Torres. Ambos finalizan sus contratos en junio de 2021 y el club sabe que debe acelerar ambas negociaciones porque son dos jugadores cotizados en el mercado.
Dentro de ese plan de renovaciones que ha iniciado la entidad con la salida de Alemany, la que se ha cogido con más fuerza y podría ser más sencilla de desatascar es la del ‘8’ de la primera plantilla que cumple su cuarta temporada en el primer equipo y que ya ha demostrado el poso más que necesario para convertirse en uno de los jugadores más importantes del equipo. Soler ha crecido al calor de la banda derecha, pese a que siempre ha sido un jugador que ha ofrecido su mejor versión por el centro.
El club tiene claro que Soler es un jugador muy importante y por ello en la reunión que mantuvieron este martes en las oficinas del club, los representantes del jugador y el presidente de la entidad, Anil Murthy, las sensaciones de todas las partes son buenas par poner las bases de un nuevo contrato que colocará al jugador valenciano en el segundo escalón de salarios de la plantilla y con una cláusula de rescisión casi prohibitiva para los clubes que estén interesados en él. Según ha podido saber Golsmedia.com, la reunión entre las partes fue cordial y se sentaron unos primeros puntos de partida en cuanto a peticiones del jugador y opciones que va a dar el club.
La negociación no está ni mucho menos cerrada pero sí se puede decir que se ha avanzado en buena dirección y que las partes son optimistas para que Soler siga siendo valencianista los próximos años. El jugador quiere seguir, lo tiene claro y a corto plazo no se marca otro objetivo que seguir creciendo en Mestalla y seguir disfrutando y cumpliendo éxitos en el equipo en el que se ha formado. Soler es uno de esos jugadores que cumple un sueño al debutar en su club y por eso piensa que todavía tiene mucho recorrido en el Valencia CF.
Ha habido varias reuniones en las últimas semanas para tratar el tema y se puede decir que la renovación de Soler marcha bien y desde el club tienen como objetivo primordial llegar a la junta general de accionistas con esta renovación cerrada e intentarán también la de Ferran, pero esa parece que será más larga.
