Javier Subirats, Director Deportivo del Valencia CF en el 2001, tenía la difícil misión de encontrar un nuevo entrenador que supliese al gran trabajo realizado antes por Claudio Ranieri y Héctor Cúper, quienes llevaron al equipo a ganar una Copa del Rey y a alcanzar dos finales de Champions League.
«Recuerdo que cuando mi agente me preguntó cuánto quería cobrar le dije que no me importaba, lo que quería era tener la posibilidad de ganar»
Su apuesta fue toda una sorpresa para la afición y la prensa: Rafa Benítez. El técnico madrileño había entrenado en la élite al Real Valladolid, donde fue destituido, y luego a Osasuna donde también fue cesado a mitad del curso. En el Extremadura logró su primer gran éxito, con el ascenso a Primera División. Y en el CD Tenerife logró también el éxito de subir a un equipo a LaLiga.
En ese verano de 2001 Rafa Benítez recibió la llamada del Valencia CF subcampeón de Copa de Europa. En el libro sobre la historia del Tenerife «1922, Es más que fútbol», del periodista Manoj Daswani, se recuerda en uno de sus capítulos cuando el entrenador recibió el interés valencianista. Esta fue su reacción: «La oferta del Valencia era imposible de rechazar, a pesar de lo bien que estaba en la isla si te llega un equipo del nivel del Valencia, siendo yo un entrenador joven y con ganas de competir por títulos, no puedes decir que no«.
Rafa Benítez añade: «Recuerdo que cuando mi agente me preguntó cuánto quería cobrar le dije que no me importaba, lo que quería era tener la posibilidad de ganar». Estas palabras las recoge el diario digital «ElFocodeportivo.com».
