“Entendemos vuestra descontento. Podemos y debemos hacerlo mejor. Comenzando por la mañana en casa, en Mestalla. Seguiremos trabajando para mejorar ahora, mañana y dentro de muchos años. Juntos lo podemos lograr. AMUNT!», con este texto en un tuit contestó Peter Lim el pasado 8 de mayo tras la primera manifestación del valencianismo para protestar contra su gestión, la de sus gestores en el día día del club, Anil Kumar Murthy y compañía, y para pedirle que se marche del club.
Más de 48 horas después de la manifestación Meriton mantiene silencio sepulcral de manera pública, hace como si la manifestación del sábado no hubiera existido
Con el paso de los meses hemos sabido que aquel tuit era una mera estrategia de los asiáticos, para tratar de desviar la atención hacia lo deportivo de cara a los medios internacionales. Aquella estrategia les salió bien, porque al estar prácticamente finalizada la temporada y haber sufrido el equipo para salvarse se podía interpretar desde la lejanía que el valencianismo protestaba por los malos resultados deportivos durante dos temporadas. Sin embargo, nada tenía que ver con lo deportivo aquellas protestas, ya que siendo algo importante el nudo gordiano de las manifestaciones vienen derivado de la gestión diaria del club, arruinado según las cuentas oficiales y principalmente por las continuadas faltas de respeto del máximo accionista y sus secuaces hacia la aficionados valencianista.
Sea como fuere, Meriton respondió a su manera y por sus motivos aquella masiva manifestación de mayo. Entonces fueron 8.000 los manifestantes que salieron a la calle, una cifra que quedó totalmente superada por la protesta del pasado sábado 11 de diciembre donde según fuentes policiales se superaron las 15.000 personas que salieron a la calle para recorrer la marcha bajo el lema “Per la dignitat del Valencia CF, LIM GO HOME’.
Más de 48 horas después de la manifestación Meriton mantiene silencio sepulcral de manera pública, hace como si la manifestación del sábado no hubiera existido o como si ellos no se hubieran enterado. Es una clara demostración más de que los asiáticos están convencidos de que el Valencia puede existir sin sus aficionados, ignorándolos constantemente. De hecho, el mensaje que emana del club y el que transmiten las personas que todavía mantienen trato directo con el presidente y enviados para las labores diarias por Peter Lim, Anil Murthy, es que la gente está siendo manipulada y lanzada contra el máximo accionista al que deberían estar agradecidos porque salvo al club con su dinero 2014.
Desde el club mantenía la esperanza de que la manifestación no superará por mucho la del pasado 8 de mayo para hacer fuerte la versión de que solo una parte ruidosa de la ficción la que está en contra de la gestión de Peter LIM, y que además es una parte que está siendo engañada y manipulada, se asegura incluso como si fueran borregos utilizados por gente que está siendo lista para sacar tajada del club.
«La demostración de que el aficionado se ha cansado fue de tal magnitud el sábado que ya nadie puede mirar hacia otro lado. De hecho, los políticos están empezando a dar la cara»
Esa es la autocrítica que se hace desde la entidad, pero principalmente desde Meriton, donde siguen convencidos de que están gestionando bien el club y que la crítica es interesada. Sin embargo, la demostración de que el aficionado se ha cansado fue de tal magnitud el sábado que ya nadie puede mirar hacia otro lado. De hecho, los políticos están empezando a dar la cara porque saben que ya no pueden mirar hacia otro lado tras la salida a la calle de tantos miles de valencianistas.
Ximo Puig, Presidente de la Comunidad Valenciana, Joan Ribó Alcalde de la ciudad, Sandra Gomez Vicealcaldesa, han asegurado este fin de semana que han tomado nota de la manifestación y que no puede no escuchar lo que está diciendo el valencianismo. Es cierto, que de momento las declaraciones son con mucha cautela pero no es menos cierto que ya no pueden quedar impasibles ante la salida en tromba de la masa social a la calle. Mientras Meriton guarda silencio, el valencianismo ha dicho basta ya y se ha iniciado un movimiento que antes o después encontrará el objetivo de sacar a Peter Lin de la mayoría accionarial y a sus secuaces del día día del club.
