El entrenador del Valencia CF, José Bordalás quiere un central y un mediocentro desde que firmó en el club de Mestalla el pasado mes de mayo. Sus nombres fueron Djené y Arambarri para reforzar las posiciones pero para ficharlos a los dos hacían falta un mínimo de 25 millones el pasado verano, que eran absolutamente inviables para las arcas valencianistas.
Finalmente Bordalás se quedó sin esos refuerzos porque las alternativas de bajo coste y cesión que habían no terminaban de agradar al técnico y por eso decidió esperar a enero o incluso al próximo verano. Ahora bien, el apretón del equipo a nivel de puntos y la buena racha encadenada de tres victorias seguidas han colocado al equipo en la pelea por la zona Europea, incluso el pasado lunes Soler se atrevió a nombrar la Champions como una «ilusión que tienen».
Bordalás quería fichar en los primeros días de enero pero ese parece que se retrasará porque todavía no tiene cita con lim
Eso ha provocado que se intente reforzar el equipo pero siempre bajo los parámetros económicos de máxima estrechez que marcan las cuentas del club y el nulo compromiso del máximo accionista de hacer crear al club. Con todo ello, van apareciendo opciones para firmar jugadores como todos los mercados y uno de los nombres que está en la mesa del Valencia CF es el del central uruguayo, Diego Godín.
El ex jugador del Atlético de Madrid ha sido ofrecido al Valencia CF, del mismo modo que también a otros clubes como Atlético o Betis. El uruguayo quiere salir del Cagliari, como así reconoció el propio jugador ayer en Uruguay y quiere jugar en la Liga española porque a sus 35 años tiene la ilusión de jugar el Mundial de Qatar dentro de un año.
Ahora bien, el nombre que está siendo valorado por el entrenador al ser un central de experiencia y con un gran rendimiento en el pasado en la Liga, algo que Bordalás valora mucho, no es una preferencia ni está cerca de firmar como se pudiera pensar porque genera muchas dudas a nivel físico. Godín se marchó hace ahora dos años y medio del Atlético de Madrid para jugar en el Inter y su paso por Italia está siendo un fiasco.
De hecho, el Inter le dejó ir libre porque no rindió como se esperaba y por eso firmó en el Cagliari, de donde se quiere marchar ahora. La edad y el flojo rendimiento del jugador, que no ha dado su nivel en Italia generan muchas dudas y hace que pese a que es una opción que se maneja, no se trata ni mucho menos de una de las primeras alternativas para el Valencia CF y para Bordalás.
El entrenador quería que los fichajes llegaran durante los primeros días de enero pero parece que las cosas se retrasarán y de hecho, la reunión con Lim que debía ser durante diciembre, de momento no se ha producido, ni parece que vaya a producirse durante este mes.