El Valencia CF arrancará este viernes la Liga con su visita al Sevilla FC en el Ramón Sánchez Pizjuán y lo hará con una plantilla muy debilitada respecto al curso anterior, en el que el equipo de Mestalla disputó hasta la última jornada con opciones reales de descender a segunda división.
Sin embargo, eso no ha provocado que el máximo accionista, Peter Lim, se haya visto atenazado y haya decidido cambiar las cosas para intentar como mínimo, mejorar las prestaciones deportiva del equipo el pasado curso. De hecho, ahora mismo mantiene un bloqueo que nadie entiende a la hora de firmar jugadores. Hace más de quince días que se tienen paradas las llegadas de Canós y Amallah.
El pasado sábado, el Valencia CF disputó en Mestalla su tradicional partido de presentación, la 51ª edición del Trofeo Naranja, y se dio un baño de realidad al ser claramente superado por el primer rival con enjundia al que se ha medido en toda la pretemporada, el Aston Villa de Unai Emery. El partido demostró que ahora mismo a Baraja le cuesta hacer un once con variantes ofensivas de garantías y que no dispone de recambios en el banquillo porque todo lo que tiene son jugadores del filial.
Tras el partido, llegó la primera comparecencia del técnico de manera pública tras su renovación. Baraja no había concedido una ruda de prensa desde el pasado 4 de junio cuando finalizó el partido en el Benito Villamarín y el equipo había logrado la salvación matemática en primera división. Aquel día, Baraja marcó un discurso de exigencia, de autocrítica, de aprender de los errores y de conseguir traer al Valencia CF jugadores que supieran lo que significada la camiseta del Valencia CF.
En los últimos años el Valencia CF, sabedor de la tensión social que existe y para tratar de blindar a las figuras de sus entrenadores, que suelen ser los únicos que hablan de manera pública, trata de estirar lo máximo el tiempo que el entrenador no habla en verano y de hecho, ni Bordalás, ni Gattuso hablaron en los partidos amistosos, pero el partido en Mestalla del ‘Taronja’ suele ser el momento y así fue también con Baraja.
Baraja está muy centrado en el inicio de la Liga pero sabe como ve todo el mundo que faltan muchos fichajes. Si no llegan, no tendrá problemas en decir lo que piensa y por lo que se pelea
El técnico fue claro y dejó titulares muy firmes. «No podemos normalizar que a falta de 6 días para empezar la Liga nos falten tantas piezas». «Necesitamos gol, jugador de banda que nos den desequilibrio. Entre cinco o seis pero hay que ver si el mercado nos permite traer a cuatro o cinco». «Hay que asumir nuestra realidad, que es dura, pero no vamos a engañar a nuestra gente, el 31 de agosto marcaremos nuestro objetivo». «No puedo decir si la plantilla será mejor que la de la pasada temporada». «Es evidente que necesitamos reforzarnos».
Es decir, Baraja no se mordió la lengua y dijo lo que todo el mundo piensa y ve, que el equipo necesita muchos fichajes para no tener una temporada de sufrimiento. El técnico espera que Peter Lim active el mercado en las próximas semanas y está convencido de que llegarán entre cuatro y cinco jugadores que ayuden a la plantilla a mejorar su nivel.
Baraja estaba tranquilo y convencido de que su trabajo está siendo bueno este domingo, tras el partido ante el Aston Villa. Sabe que tiene lo que tiene para empezar la Liga y no tiene miedo, pero tampoco tiene miedo a decirle al valencianismo lo que piensa y lo que hay, una vez se cierre el mercado de fichajes. Y por tanto, pese a que respeta los tiempos del mercado y ha querido entender la situación económica del club, la realidad es que el vallisoletano lo tiene clarísimo, él va a dar todo lo que tiene y trabajará con los canteranos como el pasado curso, pero una vez se cierre el mercado, dirá las cosas tal y como son y sin engañar a nadie.
De hecho, desde el club lo que se le transmitió este mismo domingo es lo mismo que se le viene transmitiendo en las ultimas semanas, que llegarán los refuerzos. Baraja confía en que su petición pública, haga efecto en Singapur.